51.- Segunda Visita

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Las semanas habían pasado rápidamente para las 6 chicas de la mansión Im. En cuestión de un abrir y cerrar de ojos había pasado un mes en la vida de todo el mundo. Un mes que había traído verdades, discusiones, honestidad, pena y dolor. Eran sentimientos muy comunes, pero todo solía sentir multiplicado por 3 cuando algo ocurría en la familia.

Nayeon y Mina habían estado yendo con la psicóloga Taeyeon para tratar los traumas de cada una y servía, al menos Nayeon así lo sentía. No podía obviar el hecho de cómo era antes y como era ahora. Su confianza había vuelta casi en su totalidad, su amor propio se había reparado por completo, así que ahora era Mina quien tenía que aguantar sus ataques de ego creyéndose la mejor y la más hermosa, pero a quien quería engañar Mina. Le encantaba. Amaba a esta nueva Nayeon confiada en sí misma, todas las cosas eran un poco más fáciles desde que todo comenzó a equilibrarse en sus vidas.

Hoy día era la última cita con Taeyeon, y Nayeon no podía estar más nerviosa. Jamás superó la primera carta que Mina había leído para ella en una de las primeras sesiones que tuvieron como pareja. Siempre quiso devolverle el gesto de alguna forma y Taeyeon le había dado el pase para que lo hiciera en la última sesión.

-Lamento llegar tarde – se disculpó la japonesa mientras entraba a la oficina de Taeyeon – son los últimos trabajos antes de la semana de vacaciones por navidad.

-No te preocupes, sabíamos que estabas en clases, toma asiento – Mina se sentó al lado de Nayeon mientras está le regalaba una de las sonrisas más hermosas que la japonesa había visto en su vida – como saben, está es su ultima sesión, realmente estoy muy orgullosa de ustedes y de todo lo que han crecido como mujeres y seres humanos. Especialmente tu Nayeon – Mina tomó la mano izquierda de Nayeon junto con la de ella – has crecido enormemente. Recuerdo cuando llegaste completamente destrozada, no podía hilar una frase sin ponerte a llorar, no dormías, con suerte comías y mírate ahora. Estas hermosa, llena de vida y templanza. A solo un mes de terminar el instituto y poder irte a cualquier universidad del mundo a cumplir tus sueños. Realmente me siento orgullosa de ti.

-Muchas gracias, la verdad es que no hubiese podido seguir avanzando si no fuera por ti. Hiciste un trabajo increíble conmigo. Me devolviste las ganas de vivir, de amar, de pensar incluso. Estaba tan mal emocionalmente, que ni siquiera era consciente de mis propios pensamientos, pero entonces llegaste tú y tu metodología increíble a cambiar mi punto de vista, luego vinieron Momo, Mina y Chaeyoung que me abrieron un mundo que ni siquiera sabía que existía. Están mis hermanas también, pilares increíbles en todo lo que he avanzado. La verdad es que creo que no hubiese podido hacer esto si no hubiese tenido a todas las personas que tuve a mi lado en todo este proceso.

-Me alegra escuchar eso.

-Gracias Taeyeon.

-Bueno, como ya les dije esta será la ultima sesión y cómo última sesión, Nayeon me pidió un favor, así que tu tiempo comienza en este preciso momento – Mina miró algo confundida a Nayeon y notó que la pelinegra tenía una carta en sus manos.

-La primera vez que entramos acá tu me dijiste las palabras más hermosas que alguien me hubiese dicho en la vida. La verdad es que jamás creí que palabras podrían meterse tan en el fondo de mi corazón así que te agradezco por eso – Mina sonrió – así que – Nayeon abrió la carta – te leeré algo que te escribí hace algunos días atrás.

-¡OH! Claro, soy toda oídos.

Querida Mina:

La verdad es que no sé por donde empezar. Podría comenzar retrocediendo mis recuerdos al primer momento que te vi. No comenzamos bien esa vez, pero aun así lograste que tu presencia llamara mi atención independiente del lugar en el que nos encontráramos. Mis ojos siempre se iban hacia a ti. Incluso cuando creía que quizás yo y Momo teníamos algo, nunca lo dijiste, pero siempre lo supe. Así que déjame explicarte algunas cosas.

A merced tuyaWhere stories live. Discover now