Paco

Paco se levantaba todos los días a las seis de la mañana.. Menos los sábados y los domingos que ya dependía. Tenía cincuenta años, de los que había currado más de treinta y siempre en lo mismo. De la obra no lo sacó ni dios,era lo único que sabía hacer, y bastante bien se le daba. Prácticamente no sabía ni leer ni escribir, pero lo metías dentro de una obra y lo sabía hacer todo. Aparte de ganar dinero todos los meses,también se llevó un par de ernias, una pierna rota y un hombro dislocado.en treinta años ya va bien ya. Se casó con su primera  novia cuando era jovencillo y tuvo dos hijos de los que uno aún vivía con ellos.
Paco era un currante, un tío normal, de familia, responsable, su hobby eras su terrenito donde tenía una  huerta, no tenía vicios más allá de su vino en las comidas y cervecitas de vez en cuando. El único vicio que tenía era la primitiva, que luego vino el euro millón. Todas las semanas se gastaba cinco euros.. Todas.
Siempre llevaba el resguardo en la cartera, los lunes lo llevaba a la administración y se lo daba para ver si había salido algo.
-Mira a ver si ha salido algo-
Y el dependiente casi siempre le contestaba:
-Nada Paco-
Y Paco le decia:
Pues cinco columnas más, como siempre.. A ver cuando me sacas de pobre!!
Lo que Paco no sabía es que no era pobre, tenía una vivienda en plena avenida del cid de Valencia,ya pagada, tenia un terreno a unos diez kilómetros que lo usaba para sembrar verduras de temporada que como ya he dicho era su hobby,heredado de su abuelo y tenía un Audi que aunque tuviera la tira de kilómetros era más fiable que muchos coches de ahora. No le faltaba curro y tenía en ese momento salud. Si eso no es ser rico, no se lo que es.
Pero lo que importa aquí es como es posible que Paco, ese gran hombre esté ahora separado, arruinado y con sus hijos sin hablarle. Pues es posible gracias a que cuando un lunes le dio su  resguardo del euro millón al dependiente de turno y el cuando lo metió en la máquina no le dijo lo de siempre.. Le dijo:
-Paco!! El gordo!!!
Le habían tocado 24 millones de euros,de los que a hacienda le tenía que dar buena parte, pero aún así como para arreglarte la vida a ti, a toda tu familia y parte de amistades, y aún así Paco estaba donde estaba ahora.
Te lo explico como yo lo vi desde fuera:
Paco dejó el trabajo lo primero, se compró un coche caro, pero el que vino después lo doblaba. Se compró un chalet de tres plantas pensando en sus hijos, aunque más tarde se olvidara de ellos y joyas para su mujer y ropa para el. Al principio no era muy escandaloso, pero cuanto más tenía más quería. Empezó a juntarse con gente de dinero, le convencieron para invertir y para montar
empresas, salía cada vez más por las noches y comenzó a probar drogas que nunca pensaría que probaría, de ahí a levantarse más de una  vez con alguna interesada en la cama de algún hotel de la ciudad. Su mujer se percató y se separó lo más rápido posible, llevándose casi la mitad de sus riquezas, pero a él no le importó, estaba en una nube, cada vez bebía más y se metía más aún y también tenía sus empresas, que aunque el no lo sabía ya estaban empezando a tener pérdidas. Cuando llegó la burbuja inmobiliaria Paco debía miles de euros, que por supuesto no los tenía. Su mujer si tenía una buena empresa de los que sus hijos eran los presidentes, pero como siempre se preocupó de él en vano no quiso saber nada de él cuando se arruinó. Aún así lo sacó de más de un lío durante unos años, pero cuando tenía algo de dinero se lo gastaba en cosas que no debía.
Ahora vive en una planta baja de ocupa, y entre lo que le damos la gente del barrio y lo que se gana haciendo pequeñas chapuzas sobrevive. Lo poco que tiene se lo gasta en bebida y en pillar alguna papelina
Hace poco lo vi en un bar y se lo pregunté.
-como es posible Paco?
Y me contestó :
-pues no lo sé,... Pero no tendrás un euro para el euro millón? Que hay bote esta semana.

En fin...