Our Last Year (Nuestro Último año)

Prólogo

Narra Hannah

Me hallaba en mi habitación, sentada sobre mi silla color rosa aterciopelada, frente al escritorio, con un gran libro en mis manos. Estaba por hacer una de las mayores decisiones de mi vida. Estaba por cursar mi último año en la preparatoria, y ya había comenzado a buscar alguna carrera que pudiera realizar durante el resto de mi vida.

Luego de haber hecho un test vocacional días atrás, me dejó entre tres vocaciones levemente similares: Medicina, Odontología y Farmacia.

Relamí mis labios observando las dimensiones del libro. Medicina no sería una carrera fácil.

Desde pequeña había tenido leves inclinaciones a esa increíble carrera. Para las antiguas navidades, solía pedir Sets de Doctora, y jugaba a ayudar a mis muñecas y peluches. En ese momento, con diecisiete años, ya tenía mis aspiraciones bien encaminadas. Uno de mis sueños era el poder ayudar al mundo, y creía que el ser Médica podría abrirme todas las puertas a lograrlo.

Desde la cotidianidad de mi trabajo, ¡Podría salvar vidas! Aunque si poseía un poco más de dotes, al comenzar la universidad, me gustaría desarrollar curas para grandes enfermedades que azotan la humanidad hoy en día, como el Cáncer o el sida. Si bien el cáncer poseía una cura ya, sería preferible desarrollar otros métodos más rápidos y menos dolorosos para los pacientes; ¿Quién sabía? Tal vez el día de mañana, apareciera en diarios y programas de televisión, como una médica que intenta hacer de este mundo, un lugar mejor, mediante los avances en la ciencia.

Sonreí largando un suspiro, todo saldría perfecto. Coloqué el gran libro sobre el escritorio y de un brinco, salté a la cama al escuchar un mensaje llegar a mi teléfono. Seguro sería de Luke, me había dicho que tal vez pasaba por mi esta noche para ir al cine.

Como lo amaba... Todo parecía de ensueño con él. Era un gran deportista, y planeaba estudiar Contaduría. Estaba pensando en que universidades podrían estar ambas carreras, si continuamos juntos, como planeo que ocurra. Debíamos llegar a un acuerdo sobre cual escoger, o tal vez separadas a una cierta distancia, para que no se nos dificultara encontrarnos.

Sentí como, seguramente mi padre tocaba la puerta, y sin despegar mi vista del teléfono largué un simple:

—¡Pasa!

Vi como mi padre se asomó por la puerta, con una leve sonrisa.

—Hannah, querida, ¿Podrías ir a la cocina un segundo? Tengo algo muy importante que decirte.

—Oh em, claro—Murmuré extrañada, levantándome de la cama.

Al ver a mi papá irse hacia la cocina, tecleé un texto rápido a Luke, con quien hablaba.

"Luke hablamos más tarde, papá me llamó para hablar sobre algo...extraño lo sé, apenas pueda te llamo, Te amo. - Hannah"

Al llegar a la cocina, me senté en uno de los taburetes del desayunador. Como amaba esos asientos. Mi padre se apoyaba sobre la alacena y lo noté levemente nervioso. Decidí restarle importancia y me dediqué a escuchar lo que tenía para decirme.

—Hannah, em...no se como decirlo sin que te enfades conmigo—Murmuró rascando su nuca con nerviosismo—Pero, por favor aguarda a que terminé de hablar, ¿Si? Desde que murió tu madre, se me ha hecho muy difícil sobrellevar nuestra pequeña familia, tu y yo, y el simple hecho de aún estar aquí, recordando cuando solíamos estar con ella...me destroza. En algún momento de tu vida, cuando encuentres a tu amor verdadero, te darás cuenta de lo que hablo. No hay nada peor que...perder una de las personas que mas amas, y todo a tu alrededor este recordándotelo. Con esfuerzo, logré conseguir un ascenso en el trabajo Hannah...y...nos mudaremos a nueva york—Soltó largando un suspiro.