No todo en la vida es drama

Has pensado

El tiempo que he tardado en llegar, cambiarme de ropa y volver junto a él no ha sido mucho, dándome toda la prisa que he podido por ir lo más rápido posible y no hacerle esperar mucho.

Ahora estoy frente a Jonghyun, controlando mi respiración.

— ¿Preparado para irnos?

Asiento porque además de cambiarme de ropa también he avisado a mis padres que no iría a casa aún, que comería con el hombre que camina a mi lado, a mi ritmo sintiéndome un poco mal porque tenga que obligarse a ir despacio por mi.

Mientras andamos, en un silencio que realmente para no es tan incomodo pudiendo así ordenar algunos pensamientos que repentinamente me invaden, no puedo dejar de mirar hacia abajo tampoco, en lugar de al frente cosa que seria más lógico hacer.

De reojo de vez en cuando también le miro a él, apartando rápidamente mis ojos de su persona, avergonzado por ser atrapado.

— Taemin.

Su voz pronunciando mi nombre, el cual me puedo suponer quien le ha dicho, suena como si de una suave y delicada melodía se tratase. Eso es lo que me impulsa a mirarle, sintiendo aún mis mejillas arder así como mis piernas temblar.

— Mejor creo que deberíamos ir en coche.

Mirándole confuso por un momento no comprendo como lo dice, reaccionando cuando muestra la razón que son mis piernas, lo lento que íbamos andando esta vez. Asiento lentamente, aceptando lo que ha dicho aunque seguramente esté creyendo que soy un idiota, patético por forzarme cuando debería hacer lo contrario, cuidarme más y más después de tantos años luchando por volver a caminar.

Solo caminamos unos minutos más, varios pasos que no son tantos en realidad, antes de detenernos frente a su coche. No es especialmente moderno y tampoco se ve caro. Se ve que es algo sencillo como lo aparenta Jonghyun y eso me gusta porque no es alguien arrogante, que necesita mostrar lujos para quedar bien y ganarse a los demás de esa forma que a mi desde luego no me gusta.

Que sea una persona sencilla si me gusta aunque no lo digo para que no piense de forma incorrecta sobre mi.

Estoy seguro de que si hablase para decirlo me pondría nervioso y mis palabras serian un lio que acabaría provocando que crea lo que no es y la situación se vuelva incomoda.

Por eso decido no decir nada, subiendo en el lugar del copiloto después de verle ocupar el asiento a mi lado, poniéndonos pronto en marcha aunque no se bien donde iremos a comer.

Abrochando mi cinturón antes de alejarnos demasiado compruebo, prestando la atención suficiente durante el trayecto, que Jonghyun conduce con calma, sin pasarse de los limites establecidos en lo que a velocidad se refiere.

— ¿Hace muchos años que bailas?

Su pregunta me hace sentir por un momento como una ráfaga de viento helado me atacase de pronto, como si arrojasen sobre mi un cubo de hielo.

— Más bien debería decir que llevo muchos años sin bailar —miro mis manos enlazadas sobre mi regazo —tuve problemas y eso me lo impidió. Más bien me limito en muchas cosas que me hubiese gustado hacer y no pude. Si no fuese por el señor Shin incluso hoy no habría podido bailar.

— ¿Quieres hablar de ello?

— No quiero que sientas pena por mi.. odio eso sinceramente.

— No seria capaz de ello Taemin y tampoco te voy a forzar ha hablar si no quieres o no estás preparado —sus palabras me hacen mirarle —a nadie le gusta ser obligado a algo con lo que no se siente cómodo.

Sus palabras aparte de sorprenderme me hacen sentir cómodo, agradecido aunque por mi parte, ni por la suya, diga nada más. El viaje en su coche continua tranquilo, llegando así al cabo de unos minutos a una calle que no conozco en absoluto pero parece ser que Jonghyun si.

Mientras aparca me permito observar, dándome cuenta de que la zona donde nos encontramos no es transitada ni por personas en abundancia, ni se trata de un lugar lleno de restaurantes donde podamos elegir que comer.

Es simplemente un lugar donde pocas casas son las que puedo ver, todas al parecer unifamiliares y bastante acogedoras a simple vista.

— Pensaba que iba a invitarte a comer.. ¿qué hacemos aquí?

— Aquí vivo yo —señala la casa a nuestra derecha —pero si estás incomodo podemos ir a otro lugar. Solo que.. me apetecía estar en un lugar tranquilo contigo ya que nos acabamos de conocer. Y pensé que te agradaría la idea.

Es extraño que me diga eso, tanto como que me traiga a su casa sin apenas conocerme.

Viéndole bajar del coche, soltando mi cinturón, pienso en si habría alguna razón más para que no quiera ir a un lugar publico, impidiéndome así invitarle a comer como agradecimiento y como tenia pensado. Está rodeando el coche, como bien le puedo ver, cuando reacciono volviendo a la realidad. Dejando el cinturón en su lugar bajo también del coche, sintiendo en parte mis mejillas arder por la vergüenza de haber tardado.

— ¿Seguro que estarás cómodo con esto?

— Lo estoy porque me estás invitando a tu espacio personal con total seguridad ante ello —sonrío ampliamente —nunca antes he ido a una casa que no es la mía sin contar la de Jisung.

— ¿Eres muy cercano a ese chico?

¿Cercano? Ahora mismo Jisung es como un hermano pequeño para mi y le aprecio demasiado como para tomar un camino que me alejase de él.

— Es como mi hermano pequeño —le sigo hasta la puerta de su casa —y me atrevería a decir que es la persona que más me comprende y yo igual lo soy para él.

Por parte de Jonghyun no recibo más preguntas sobre Jisung, viéndole como abre la puerta de su casa, permitiéndome pasar por delante de él.

Fijándome en sus acciones nada más entra decido imitarlas, por respeto por supuesto, dejando mis zapatillas que tengo que quitarme en el suelo, poniéndome no muchos minutos después y con demasiada dificultad en pie.

— ¿Te encuentras bien? —con sus manos me ayuda a levantarme —podrías habértelas dejado puestas.

Negando le aseguro que si que me encuentro bien.

Una vez coloco bien mis zapatillas donde no molesten y en silencio le sigo hasta donde me lleva, fijándome en lo sencillo de su casa y la decoración de la misma hasta lo que veo es su cocina, más amplia aunque del mismo estilo de cuanto he visto y que realmente encaja bastante con el hombre que tengo frente a mi.

— Siéntate por favor —señala la mesa.

Acercándome hasta la misma, aunque me gustaría ayudarle, me siento lo cual mis piernas ya en cierto modo cansadas agradecen. No aparto en ningún momento mis ojos del hombre frente a mi, curioso ahora mismo por saber cosas de él, como porque es tan amable y bueno con alguien a quien de poco conoce.

— Jonghyun..

Jonghyun no me responde por un momento, pensando que quizá simplemente no me ha escuchado por estar concentrado en la comida. En un nuevo intento por llamarle le veo girarse, poniendo sobre la mesa tantos platos que me sorprendo, pensando quizá que aquí comerían incluso cinco personas aunque realmente seamos solo dos.

— Todo huele de maravilla —suelto casi sin pensarlo —¿ya tenias previsto invitarme?

— No tenia pensado invitar a nadie hasta que te vi bailar y quise conocerte.

¿Vergüenza? ¿Timidez?

Mis mejillas arden tanto que apostaría a que si me mirase en un espejo ahora mismo me vería más rojo que la camisa que he usado en mi presentación.

— No se que ibas a decirme antes cuando me has llamado mientras preparaba la comida —le miro atento de sus palabras —pero me gustaría saber algo. No se realmente mucho de ti ni porque has tardado tantos años en bailar pero.. ¿has pensado dedicarte a esto profesionalmente ahora que ya has retomado el baile nuevamente en tu vida?