Un Pequeño Kurta【Kurapika Y Tu】

【Capítulo 2】

(c/c) color de cabello.
(c/o) color de ojos.
(T/n) tu nombre.

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|| Capítulo 2: Nadie puede contra un Kurta ||

Al abrir la puerta la peli-(c/c) quedo atónita, grande fue su sorpresa al ver a Leorio parado y con su cabello azabache todo alborotado y con algunas benditas/curitas (como se llamen en tu tierra :v) en su cara y manos. El Kurta ya hacía en uno de los bolsillo del traje de oji-cafe tratando de salir e ir a manos de su amada - en secreto, claro-- oji-(c/o).

— ¿Leorio? ¿Pero que te paso?, párese como si un camión te allá atropellado — pregunto la muchacha al ver al mayor de sus amigos tan herido.

— ¿qué me paso?, bueno veras... — corto lo que hiba a decir — Sabes que  mejor que él te cuente — dijo el pelí-negro para luego entregarle a la chica el Kurta y una mochila para luego retirarse todo indignado.

Por otro lado el rubio estaba feliz de estar de nuevo en las manos de la (c/c). Pero en su diminuta cabeza tenia muy en claro que la chica le preguntaría lo que había ocurrido.

— Kurapika, ¿Qué fue lo que paso?, ¿no se supone que Gon estaba cuidando de ti? — indagó una (T/n) muy confundida mientras cerraba la puerta de su enorme casa. — y, ¿por qué Leorio estaba todo vendado? — siguió con su cuestionario sin apartar la mirada de su amigo el Kurta.

— ja.. ja.. ja, — El nombrado río nerviosa mente, para luego aclarar su voz. Y mirar a la chica de cabello (c/c) y ojos color (c/o), esos hermosos ojos qué tanto la hacían fascinado, trado calmarse un poco — bueno, veras. Lo que paso fue...

Flash Back.

Un pelí-negro y un rubio, el cual aun ponía resistancia, ya habían llegado a la isla ballena, el oji-miel aun no entendía el por que el oji-gris se comportaba así. Si él era un chico serio y que se la pasaba la gran parte del tiempo se la pasaba tranquilo y sereno.

— oye, Kurapika, ¿qué te pasa? — indagó con un tono preocupado —, Te noto demaciado serio o debería decir inquieto. — dijo el moreno míentras el rubio seguía con el seño fruncido.

— no me pasa nada — dijo mientras negaba con la cabeza.

— se que te susede algo, pero, si no me quieres contar lo que susede esta bien.

— no me susede nada — negó por segunda vez.

— si tu lo dices. — en menos de unos segundos se formo un silencio incomodo. — vamos, Kurapika, será divertido. Te mostraré la isla por completo, el bosque, la playa y comeremos galletas de Mito-san hasta no poder. — dijo Gon entusiasmado.

— esta bien —dijo sonriendo.

Ese mismo día.

Un rubio se encontraba sentado en el sentro de la habitación de Gon.

— ¡agh! ¡Qué aburrido! ¡Y ni si quiera pude traerme mis libros! — dijo reprochó tirándose al piso. — veamos que hace Gon — dijo levantándose pero vio algo que lo dejo pálido. Ya no estaba solo. El moreno dejo la ventana de su habitación abierta. Y por ella entró un...... Mapache 🦝.

(no es Jeff The Killer, es El Mapache Tekila :v)

— ¡Ahhh! — el rubio gritó y empezó a correr por la habitación del moreno siendo perseguido por el mapache.

Mientras tanto en otro lugar.

— Mito-san, ¿has visto a Kurapika? — preguntó el moreno desde el comedor.

— creo que no — dijo Mito-san saliendo de la cosina.

— donde estará —

Con Kurapika.

— ¡si!, ¡¡ahora si podre ir con (T/n)!! — dio un grito de guerra, el rubio había hecho tregua con el mapache y ahora se encontraba trado en el suelo. — recuerda si haces esto bien te daré las galletas de mi mochila — le dijo al mapache. El cual se llama Jeff. (•ワ•)っ

— ¡Kurapika! ¡Pero que paso! — indagó el moreno al ver toda la habitación destrozada

— ¡Gon!, ¡ayuda! ¡el mapache me quiere comer! — y Gon como es tan inocente, se la creyó.

Ese mismo día el rubio se fue de Isla Ballena. Pero su plan no funciono como lo esperaba ya qué ahora quien lo cuidaría sería Killua. - y Alluka-

Pero aun que el rubio no planeo nada, Killua terminó dejando al oji-gris con Leorio, solo por una gran razón. Alluka, vistió a Kurapika con un vestido de una de sus muñecas y estaba jugando a la boda.

— ¡Alluka! ¡Kurapika no es una muñeca! ¡El hecho de que párese chica no significa que lo sea! —eso fue lo que el alvino dijo. En pocas palabras, le dijo trapo.

Ahora el Kurta estaba en la casa de Leorio, siendo perdeguido por un gato naranja. (presido a Garfeol) Pero hubo un momento en el qué el rubio se subió al lomo del gato y empezó a caobagarlo como si fuera un toro mecánico.

— ¡Kurapika! ¡Ya llegu...— no pudo terminar por que el gato se abalanzó sobre el y lo atacó.

Fin del Flash Back.

—Y eso fue lo que paso. A Leorio lo atacó un gato, una niña loca trato de casarme con un oso de peluche y un mapache quizo comerme. Qué por cierto se llama Jeff. — dijo el rubio.

— y todo eso ocurrió en una semana — dijo riendo — bueno espero y que un oso no me ataque. — dijo tomando al rubio entre sus manos y llevándolo a la cosina. — creo que más tarde iré al centro comercial y te comprare ropa. No puedes estar con el mismo traje todo el tiempo — dijo sentándose en un banco de la barra.

— no es necesario, la abuela de Gon me tejió muchos suetersitos — dijo sonriendo

La (c/c) miro dentro de la bolsa del rubio y pudo ver que era sierto. ¿Por que?, En el momento de abrir la bolsa del rubio explotó.

— ¡¡¿pero que rayos?!! ¡Oh! — tomo un suéter qué esta tirado — ¿un vestido rosa? — indagó mirando aquélla qué prenda.

— ¡fue Alluka! — se excuso el rubio sonrojado.

— un recuerdo de tu boda — dijo la oji-(c/o) riendo.

— ¡y se supone que tu boda es el mejor día de tu vida! ¡Esa niña trato de casarme con un oso! ¡Un oso! — dijo el rubio.

— claro rubia —