Envy 🧪 Reiji Sakamaki 🐍🔞

🧪 7

Tn llegó a casa, se había quedado a dormir con Reiji tras que él la invitase y que sus padres estuviesen de acuerdo. Al entrar, notó que todo estaba en silencio, lo que quería decir que no había nadie en la mansión. Se dirigió a las escaleras y subió a su cuarto, tomó ropa y se dirigió al baño, pero antes de cerrar la puerta una mano la detuvo.

– ¿Qué...?

Frunció el ceño al ver a su hermana.

– Muévete, tengo bañarme porque tengo que salir, tengo un almuerzo importante.

– Bueno, te hubieses bañado antes de que llegara.

– Mira, si tú te quedaste a dormir por ahí, no es mi problema. Ahora muévete.

– Olvídalo. Ahora déjame bañarme en paz.

– ¿Ah? Oh, vaya –rió.– No puedo creer que ahora te creas la reina de Inglaterra sólo porque te acostaste con un chico –se burló.

– ¿De qué...?

– Mamá dijo que te quedaste a dormir con tu noviesito, Reiji. ¿Coge bien? Es bastante guapo.

– Cierra la boca, Saraella.

– Veremos cuánto te dura, ¿No?

– No te metas en mis asuntos.

– Tú te metes en los míos, así que estoy en todo mi derecho.

– ¡No, no lo estás!

– Uy, qué agresiva –rió.– No te creas la gran cosa sólo porque te metiste en la cama de un Sakamaki. No durarán nada, él te dejará pronto y te quedarás sola, como siempre has estado. ¿Sabes por qué? Porque no eres suficiente para un Sakamaki.

– ¿Y tú cómo sabes eso? ¿Cómo conoces a los Sakamaki?

– Digamos que conocí personalmente a Tougo-san –rodó los ojos.– No es lo importante. Mi punto es...que no durarás. No eres suficiente para alguien como Sakamaki Reiji. Eres baja, fea, gorda, tan pálida que pareces un papel, ni siquiera tienes los atributos necesarios. Mírate a ti y mírame a mí, yo soy más delgada que tú, tengo más pechos y más trasero que tú, y soy mucho más hermosa. Soy la mayor, la favorita de papá y mamá, tengo un título en abogacía y soy una exitosa vendedora de bienes raíces. ¿Y tú qué? Nada, no eres nada. Estudias en preparatoria aún, eres una mocosa, tus notas tan "perfectas" no representan nada más que eres un intento de perfección...Pero te quedarás en eso, en un intento. Nadie va a amarte jamás porque no eres perfecta.

– ...

La menor no dijo nada, se quedó en completo silencio ante las palabras de su hermana.

– ... –sonrió.– ¿Ves? Ni siquiera puedes contestarme. No puedes refutar ni negar nada porque sabes que tengo razón. No eres nada más que un fallido intento de perfección –se acercó a ella.– A los chicos les gustan las chicas bonitas, de rostros de muñeca y cintura pequeña. Las feas gordas como tú...se quedan solas, o con algún gordo baboso que aplasta el trasero en el sofá todas las noches mientras ve insulsos programas de televisión y se llenan de cerveza... –rió.– Báñate si quieres, no es como si el agua pudiese quitarte tu cara de bruja.

Saraella giró y regresó a su cuarto, azotando la puerta.

Tn azotó la puerta del baño mientras soltaba un grito de frustración; giró y se miró al espejo. Su reflejo parecía decirle...no, más bien gritarle, que todo lo que su hermana decía era verdad; que estaba gorda y era blanca como un papel, que era fea, que no era perfecta, no era nada...nada más que un fallido intento de perfección. Sollozó, sintiendo un nudo en su garganta; tomó un pote de crema para la cara que era de su hermana y lo arrojó contra el espejo, partiéndolo en pedazos.