☆VeInTe☆

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Blas -¡¡Señor Aguilar!! ¿puede correr más rapido?, ¿o lo paso al grupo de chicas?-

Lujan -¡Como si las chicas fuesemos débiles!-

Pablo -Hablo Raúl-

Estaban en la clase de educación física, corriendo vueltas a la cancha.
Y como de costumbre, había peleas entre todos.

Mía estaba sentada a un costado, había dicho que tenia baja la presión, para evitar la clase.

Junto a ella se sento Vico que acababa de terminar de correr.

Mía -¡Ay Vic!, ¡nose como aguantas para correr tanto!-

Vico -¿Vic?, que soy, ¿lapicera?-

Mía -¡Noo!, es escuche que Rocco te llamo así, y me parece que queda muy simpático-

Vico -Si... puede ser... ¿y porque decia mi nombre?-

Mía -¿Interesada?-

Vico -¡No dije nada!- dijo levantando ambas manos al aire -¿Como va todo con tu nuevo mexicano?-

Mía -¡No es un bolso!, ¡no lo llames como marca!-

Vico -¡Si que te cambio la cabeza amiga!-

-¡SEÑORITA PAZ! ¡A LA CANCHA! ¡VAMOS A JUGAR AL QUEMADOS!-  se escucho el grito de Blas y Vico le hizo caso.

Blas -Linares y... Dunoff... son las capitanas de equipo, elijan-

Pilar y Lujan comenzaron a elegir y los equipos se conformaron.

Marizza, al contrario de sus amigas, no era fanática del deporte...
Pero la competencia le encantaba, entonces ella amaba ese tipo de juegos.

Marizza estaba jugando tranquila hasta que, sin querer, Guido le pego un pelotazo en la cara que la tiro al suelo.
Haciendo que caiga mal, y su pie se doble.

Luego de que Marizza insulto a Guido con todas las letras, Diego la ayudo a levantarse.

Blas -¡Por trampa! Gana el equipo de Linares-

Fernanda -¡Siempre le da privilegios a linares!-

Marizza -¡La que no sabe de privilegios!- dijo sarcástica.

Blas -Andrade... ¡callese!,
Urcola, acompañela a que se lave la cara  y luego vallan a enfermería- ordenó.

Pablo miro de reojo mientras ellos se iban, algo en su interior le molesto.
Le molesto lo suficiente, para buscar una excusa para ir al baño a seguirlos.

Se quedo detras de la puerta escuchando.

Diego -¡Menos mal que no moriste Marizza!-

Marizza -Exagerado...- dijo dandole un pequeño golpe en el hombro.

Diego -A ver...
mostrame el chichón que te dejo Guido-

Marizza acerco su cara a Diego, ya que el golpe había sido en la frente.

Diego -Te hizo re mal...- Marizza asintio -¡No puede ser!- dijo preocupado.

-¿Que? ¿que pasa?- dijo Marizza asustada.

Diego -Es que no me había dado cuenta de los lindos ojos que tenes..-

Marizza se sonrojo un poco y se rio nerviosa -Gracias... pero me hiciste asustar...
Vos tambien...- dijo esto último mirando fijo a Diego y sonriendole.

Pablo escondido no podia creer lo que escuchaba.

-¿Ah si?- escucho decir a Diego.

Pablo ya sabía lo que seguía.
Y no quería que pase.

ERREWAY- Una historia diferenteWhere stories live. Discover now