—Anda.—me anima sonriendo, a lo que solo río fuertemente de nuevo.
—Estas demasiado loco.—me encuentro a horcajadas sobre el en mi sofá, y quiere prender una caja de cigarrillos completa.
—Tu sólo te encargaras de encenderlos, ¿vale?—arquea sus cejas y rio por una vez mas, rodando los ojos y negándome.
—Te vas a morir de cáncer.—murmuro pero decido hacer lo que pide.
Hace una mueca encogiendo los hombros como si no le importara y le golpeo en el brazo. Toma la caja de Marlboro rojo la cual tiene veinte cigarrillos y yo sólo me dedico a tomar el encendedor.
—Estas jodidamente loco.—murmuro, el sonríe.
Abre la caja y luego la voltea sacando un poco los cigarros y por último los coloca en su boca, es gracioso verlo con veinte cigarros.
Sonrío mordiéndome el labio inferior y comienzo a encender todos los cigarros mientras el empieza a dar varias caladas para que se prendan y lo logra. Chillo y alzo los brazos en forma de victoria. Los toma con su mano y expulsa el humo en forma de arcos.
—¡Lo logramos!—exclamo sonriendo, el también sonríe.
—Así es pequeña, ¿quieres hacerlo?
—No, claro que no.—respondo con el ceño fruncido. Le da otra calada a los veinte cigarros, para seguir fumándolos pero le golpeo.—Basta.—reprochó arqueando las cejas, y besa mi mejilla.
—Vale, vale.—apaga el resto de los cigarros, quedándose con solo uno.
—¿Esto era lo que me querías mostrar?—pregunto y niega con la cabeza riendo. El olor a tabaco y humo invade la sala.
—¿Entonces?
—Luego.
—Señor Trosky quiere saber.—hago un puchero, le veo sonreír pero a la vez mirarme extraño.
—¿Quién?—cuestiona burlón, a punto de reír.
—El romántico peluche que me has regalado.
—¿Le has puesto nombre a un peluche?—arquea las cejas. Hago un mohín.
—Bueno el «gato calavera» debía tener un nombre.
—¿Cuantos años tienes, pequeña?—ríe, lo cual me hace golpearle en el brazo. —Me sorprende que aún puedas golpear.
Es entonces cuando la broma pasa a ser una molestia, así que me levanto para alejarme de él..Me toma del brazo sentándome de nuevo en su regazo y me da un beso en el cuello.
—Sólo bromeo.—murmura sobre mi piel.
—Si yo estuviese muerta, ¿seguirías bromeando?
—Claro que no, Beth. —su expresión es seria y sus ojos se clavan en mi con intensidad.
—Bueno, estoy en mal estado.
—Creo que necesitas darle un abrazo a «Trosky».—murmura burlón y esbozo una leve sonrisa. Su teléfono suena interrumpiendo a lo que otros llamarían «escena romántica», porque este tipo de cosas es nuestro romanticismo.
—¿Aló?—contesta serio y le miro con atención.—¿Debo ir ahora? Estoy algo ocupado.—hace una mueca. —Vale, vale, ya voy.— y cuelga dándome una mirada de disculpa.
—¿Qué pasa?
—Trabajo.—responde y asiento.
—¿Te veo en la noche?
ESTÁS LEYENDO
Shades Of Cool {1}
Mystery / Thriller"Frío como la nieve." "Tan insensible y duro como una piedra." "Silencioso como un hombre que espera la muerte." Obra registrada en SafeCreative.org bajo el código 1412242833800, todos los derechos reservados. ®