XVIII

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- Tranquilízate, poniéndote así no ganarás nada –

- No puedo ¿Cómo se enteró Itachi que estoy embarazada? Si no fuiste tú, se lo dijo el maldito de Naruto –

- ¿Y? tú fuiste la que no se casó, en estos momentos no tendrías ningún problema –

- ¡Mierda! – La peliazul se maldecía, tenía muy claro que no había más oportunidades con el Uchiha – Me las va pagar, ese maldito me las va  pagar –

- Vámonos –

- ¿Qué? –

- Que nos vayamos, al final a los dos nos meterán a la cárcel, vayámonos ¿a qué nos quedamos? Podemos vender los departamentos –

- ¿Estás seguro? –

- Muy seguro, Yo puedo presentarme a declarar, pero al final perderé todo y no pienso quedarme en la cárcel, por el momento ambos debemos presentarnos a trabajar, no debemos levantar sospechas –

- No, yo no voy a regresar a la empresa –

- Está bien, solo esperemos –

- ¿Hablaste con ella? –

- Si, no me contesto cuando le cuestione sobre su embarazo – el pelinegro dio un suspiro – pero ahora ya me siento libre y tranquilo –

- Itachi necesito que hablemos –

- Dime –

- Voy a Dejar a Sasuke a cargo de la empresa –

- Oh –

- ¿Eso es todo? –

- Está bien, pienso que a los dos nos hace falta alejarnos de la empresa –

- No me entendiste, Sasuke quedará a cargo de esta empresa, me iré al extranjero a encargarme de la sucursal que abrimos –

- ¿Me vas a dejar? –

- No lo sé, al menos que tú quieras venir conmigo –

- ¿Cuándo? –

- Terminando el proceso legal, que ya está próximo, no creo que Konan se presente a la empresa y Kakashi ya no tiene salvación –

- ¿Ya hablaste con él? –

- No, voy a esperar unos días, Itachi ¿Konan te dijo quién es el papá del bebé que espera? –

- No, ya te dije que no me contestó ¿acaso tú lo sabes? – Miró al rubio molesto, después de que este asintiera - ¿Por qué no me lo dijiste? –

- Ya no tiene importancia -

- Quiero saber quién es –

- Kakashi –

- No lo imaginaba, ahora entiendo, esa vez que los encontramos en Francia, iban juntos –

Naruto rodó los ojos e hizo una mueca de enojo al recordar su fallida luna de miel – No tienes por qué mencionar algo que ya no importa –

- ¿Tu luna de miel no importa? –

- No, eso no fue una luna de miel, ay mira ya dejemos de hablar de cosas que en estos momentos carecen de relevancia, lo importante aquí es que ella quería llevarte a la cama y decir que el bebé era tuyo, y debemos acelerar el proceso o estoy seguro que ambos se irán –

- Tienes razón, ella no se presentó de nuevo a trabajar, y pienso que no lo hará -

- Cariño ¿Puedo pasar? – la voz del peliplata interrumpió su plática.

- Claro Kakashi adelante – el aludido miró al rubio y el pelinegro.

- ¿Interrumpo algo? -

- No amor, que bueno que vienes, ven siéntate a mi lado – le indicó Naruto, mirando de reojo a Itachi, quien estaba más que molesto por las palabras de su ex–esposo.

- Si cariño ¿qué pasa? – pregunto el peliplata.

- Le comentaba a Itachi que voy a dejar la empresa en manos de Sasuke –

- ¿Qué? –

- Quiero que cuando nos casemos empecemos de cero, obviamente Sasuke me dará la parte que me corresponde en cuanto a ganancias y un "sueldo" cada mes, en realidad mi parte de la empresa está a nombre de mi hijo, y su apoderado es Itachi, al final Itachi es el padre de mi hijo, debe hacerse cargo de sus bienes –

- Entiendo amor, yo estoy más que dispuesto a apoyarte – La idea ya no era de su agrado, una cosa era que Sasuke fuera el presidente de la empresa, pero algo muy distinto el que se convirtiera en el casi dueño de todo ¿Dónde quedaban sus planes?

- En realidad yo no quería esta empresa, nunca me case por interés, el dinero no es problema en mi familia, sé que tú no eres como Konan y que me amas de verdad –

- Imagino que nos casaremos lo más pronto posible –

- No, en cuanto el proceso legal termine y se demuestre que no tienes nada que ver en el fraude no casaremos ¿te parece? –

- Claro, claro, como tú digas está bien –

- Eres tan lindo amor – el rubio le sonrió a Kakashi, el segundo solo hizo una media sonrisa, no estaba contento con la noticia que le habían dado, al final no importaba él se iría de ahí.

- Yo me retiro – el pelinegro se puso de pie, para retirarse de la oficina.

- Gracias Itachi – dijo el rubio, quedando sólo con Kakashi.




- Sasuke te estaba buscando, ¿me acompañas? Necesito ir al banco – ambos hermanos salieron de la empresa. Ambos iban en el carro de Itachi.

- ¿Hablaste con Naruto? – preguntó el menor.

- Si, ya me dijo lo que planea hacer ¿Estás de acuerdo con eso? –

- Si, no tengo problema, y ¿tú? –

- Mientras este feliz con Naruto, no me importa lo demás –

- jajajajajaja ¿ahora sí estás enamorado? – miró a su hermano, quien iba manejando.

- Más que enamorado, lo amo como no tienes una idea, no voy a perderlo –

- Me alegro por ti, quiero que sean mis padrinos de boda –

- Por supuesto que si - ambos bajaron del automóvil para entrar al banco.

-¡Itachi! – el pelinegro volteó al escuchar su nombre.

- Maldito si no soy feliz, el maldito rubio tampoco lo será –

- Espera Konan no hagas una tontería, hablemos –

- ¡No te muevas maldita sea! Ya no hay nada que hablar –

- Claro que si, yo – Mierda se dijo para si mismo – yo te amo –

- No te creo, me dejaste –

- Porque me dolió que me dejaras plantado, pero créelo de verdad te amo – el pelinegro trató de dar un paso hacia la mujer – baja el arma por favor –

- No te muevas o te disparo – Gritaba Konan, quien estaba apuntando con una pistola en dirección de Itachi.

- Yo te amo, entiéndelo –

La peliazul sonrío de manera maliciosa, su mirada estaba perdida – entonces vamos a morir juntos, pero primero quiero que le llames a Naruto, quiero que escuche que me amas –

- Sasuke por favor – el mayor de los hermanos le indicó al menor que hiciera lo que ella pedía.

Sólo dame una oportunidad.Wo Geschichten leben. Entdecke jetzt