Prófugos

VI

Mire hacia atrás y lo vi, maldito, trate de luchar para que me suelte, pero me tenia demasiado agarrado, me empezó a arrastrar hacia afuera de la tienda, pude ver como el otro apareció del otro lado 

-Dale, al auto, abrí la puerta- le dijo y el otro corrió fuera de la tienda y abrió la puerta del auto que estaba ahí estacionado esperándonos, el empece a pegar en los brazo, pero no me soltaba por nada del mundo, quería gritar, pero me tenia tan apretado del estomago que me dejaba sin respiración, salimos fuera de la tienda, todos miraban y nadie hacia nada, estábamos a unos metros del auto, pero este me soltó de golpe y se callo a mi lado, lo mire, Rodrigo le había pegado con una lata de algo que sostenía en la mano, la tiro y me agarro de la mano haciéndome correr por la calle, mire para atrás y vi como el otro chico bajo del auto a mirar a su compañero y como este se sentó en el piso y nos miro 

-Vamos, no mires para atrás, por acá- me dijo Rodrigo metiéndonos por un callejón, llegamos al final y había un paredón- Veni, por las cajas- el empezó a subir y me ayudo a mi, subimos y saltamos el paredón del otro lado- un poco mas- seguimos corriendo, cruzando la calle y entrando al siguiente callejón detrás de el edificio hacia un auto- veni, vamos- corrimos al auto el abrió la puerta y nos metimos, Josefina estaba conduciendo y Guille iba a su lado- arranca, arranca- le dijo Rodrigo y sin pensarlo arranco, Rodrigo se volteo a mi y me miro- ¿estas bien?- me empezó a mirar por todos lados, como asegurándose de que estuviera bien 

-Si, si, estoy bien, solo que me asuste- le dije, el asintió y me abrazo entre sus brazos, apoye mi cabeza en su pecho y pude ver como Josefina y Guille nos veían por el retrovisor y se sonreían mutuamente, volvimos a llegar al edificio donde estábamos antes, pero entramos por el garaje

-Veni, vamos- me dijo Rodrigo y bajamos del auto 

-Damos una vuelta para ver que onda y te decimos- le dijo Guille y le dio una bolsa, Rodrigo asintió me agarro de la mano y empezamos a caminar por el garaje, era enorme, llegamos a una puerta y salimos al living

-¿Seguro que estas bien? -me dijo soltándome la mano y yendo hacia la cocina 

-Si, si, de verdad, estoy bien- le dije siguiéndolo, él empezó a sacar productos de la bolsa y poniéndolos arriba de la mesada 

-¿Tenes hambre? -abrió un cajón, doblo la bolsa y la guardo 

-Si, un poco si ¿que vamos a comer?- le pregunte mirando los productos 

-Pizza, pero hay que amasarla y todo, así que va a tardar un poco- camino hacia una pared, agarro un delantal y se lo empezó a poner 

-¿Queres que te ayude? -él sonrió agarro el otro delantal y se acerco a mi, me paso las tiras por el cuello y me las ato, se paro detrás mio, agarro los hilos de las cintura y me termino de poner el delantal

-Mejor así, por que con la harina vamos a hacer un desastre- me dijo, agarro un recipiente de abajo del mostrador y abrió la harina, puso el paquete entero, un poco de agua y empezó a amasar, después de amasar un rato en el recipiente, tiro todo sobre el mostrador- ¿lo amasas mientras yo preparo la salta y corto algo de queso?- asentí, me lave las manos, me las saque, me remangue el buzo y me puse a amasar, el se lavo las manos, se las seco y agarro su celular, de pronto se empezó a escuchar música, lo mire y él me estaba sonriendo, así que le sonreí de vuelta, el agarro una tabla y un cuchillo y empezó a cortar tomates mientras tarareaba la canción, termino de picar todo, agarro una sarten, prendió una hornalla, puso la sarten un poquito de aceite, le tiro los tomates revolvió un poco y se acerco a mi- Eso esta genial, ponela aca dentro y la tapamos un rato- puse la masa en el recipiente y lo tapo con un repasador- lo dejamos un poco ahí- me miro, aproveche y le pase la mano por la cara poniéndole harina, él me miro agarro un poco que había sobre el mostrador y me lo tiro, le iba a pasar la mano de nuevo pero el me la agarro en el aire, lo intente con la otra pero también me la agarro, me puso contra la mesada que había del otro lado apoyando mis manos en la encimera- ¿ahora que?- me dijo elevando una ceja acercando su cara a la mía