𝑪𝑳𝑨𝒀 | Obidei

𝑰 𝒘𝒂𝒏𝒕 𝒔𝒐𝒎𝒆𝒕𝒉𝒊𝒏𝒈 𝒘𝒊𝒕𝒉 𝒚𝒐𝒖

Óbito escasas veces habló con Rin, no la soportaba, no es una mala persona solo que no era del agrado de Óbito, y él para no ser descortés, la evitaba.

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Después de una semana desde que vió como Óbito se le "confesaba" a Rin, Deidara volvió a hablar con el azabache.
Lo evitaba porque al verlo sus ojitos picaban por las lágrimas que amenazaban salir y solo quería abrazarlo, pero no, debía contenerse.

Óbito sintió toda esa semana la ausencia de su rubio y la sufrió. Extrañaba tomarlo de la mano, hacer figurillas de arcilla junto a él, abrazarlo y darle besitos en sus mejillas.

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- "H-hola" - Deidara estaba reprimiendo sus ganas de lanzarse ahí mismo a Óbito y decirle lo mucho que lo quería.

- "Oh, hola" - Si el rubio lo seguía mirando con esa expresión tan apagada se pondría a llorar.

- "¿C-cómo has estado?" - Su cara denotaba pesar pero en sus ojitos había un brillo y el motivo era Óbito.

- "Mal. Te extrañé mucho Dei" - Al diablo todo, ya no soportaba.

Ya no le importaba que estuvieran en el patio, que sus amigos y toda la escuela los vieran. Él le demostraría a Deidara cuánto cariño le tenía.

- "Ven, abrázame" - Óbito extendió sus brazos hacía Deidara - "Por favor, Dei"

Deidara sollozó mientras una lágrima corría por su cara. Se acercó tambaleante y con la mirada baja hacía Óbito. Cuando estuvo en sus brazos se soltó a llorar más fuerte, amaba cómo Óbito lo arrullaba, cómo lo sostenía fuerte pero sin herirlo, y cómo le pedía dulcemente que se tranquilizara.

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Estaban en el mismo lugar de siempre, Óbito sentado y Deidara recostado en su regazo, había logrado que el rubio se calmara y comiera su almuerzo, ahora estaban descansando.

- "¿Por qué me estuviste evitando?" - Aprovechó que Deidara estaba tranquilo para preguntar.

- "Pensé que estarías más feliz con esa niña que conmigo" - Su voz se quebró.

- "Dei, tú sabes muy bien que eso no es cierto, te prefiero a ti antes que a nadie" - Lo dijo mientras acariciaba el pelo del rubio.

- "¿D-de verdad?" - Sintió como su corazoncito empezó a latir más fuerte.

- "Sí, y quiero que te lo grabes en la mente" - Con su dedo índice tocó la frente de Deidara y ambos sonrieron.

- "Óbito, te quiero mucho"

Con esas palabras Óbito determinó que quería a Deidara solo para él, como su novio. Mañana le diría a Rin que lo sentía y que no la quería en verdad.

- "Yo también te quiero Dei" - Le hizo más mimos al rubio - "Mañana quiero decirte algo importante"

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