En el vestíbulo de la transformación - Alejandra Mosquera

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Llegando a la entrada de la transición, sé que cada una de las personas que están aquí presentes te aman, te recuerdan y siempre te llevaran en su corazón y en su alma. Nos demostraste que es un ser guerrero, que es ser un padre, un abuelo y un bisabuelo, un hombre capaz de seguir en medio de las dificultades, en medio de las situaciones difíciles, parándose en la raya , con toda su criterio y su fuerza presente, demostrando que somos capaces de lograr todo lo que nos proponemos; amando a una mujer  en medio de todas las cosas, resistiendo ante todo “ un gato de siete vidas” un ser que lleno el corazón y estuvo ahí para cada uno de nosotros, siempre con sus palabras sabias, con su conocimiento, con sus experiencias. Como tú decías “yo ya pasé por eso mijo, yo sé porque se lo digo” “la vida no me la contaron, la vida yo ya la viví”, nos enseñaste a ser desconfiados, y mostrarnos cosas que ya habías vivido y que querías que fuera un espejo o un ejemplo, para que no cometiéramos los mismos errores. Te recordaremos siempre. Se que tu vida y tu energía está presente, que tu vibra está aquí.  Te conmemoramos como un hombre feliz que batallo hasta el último día, que no se arrepintió por nada de lo que hizo, porque lo disfruto. Por ser ese bailarín estrella, por construir una familia, por darle vida a unos hijos, unos hermanos, unos nietos y bisnietos que tuviste el placer y la dicha de conocer y que sé que te llevas y que nos quedamos con los mejores recuerdos, con las mejores palabras y los mejores deseos; Se que te sientes orgulloso porque tus hijos hicieron lo que tú en algún momento de tu vida hubieses querido hacer y te sientes orgulloso por tu apellido, porque marca la diferencia , porque somos inteligentes, berracos y echados para adelante.
El cielo está de fiesta, entraste con tu traje de paño, tu boina, tus zapatos lustrados y tu pulcritud como siempre, el universo está recibiendo un ser maravilloso, tan rudo, pero tan noble de corazón, que era tan nostálgico cuando nos veía, cuando le hablábamos y preguntaba quien éramos, y que hasta el último día tuvo su banquete de comida, con sus masajes, con sus remedios caseros, con su inteligencia para cosas de electricidad, de reparar lo que fuese, de no quedarle grande nada, ni nadie.
Valorar a las personas que están ahí para nosotros, para entender que somos seres humanos, que cometemos errores, no somos perfectos y cada ser nos deja un legado de estar unidos, de compartir, de sin importar el apellido, o que seamos de diferente mama, estuviésemos el uno para el otro apoyándonos, amándonos y fortaleciendo esas cosas que son para la construcción de cada uno. Dejar ese odio, ese rencor, esa soberbia que a ninguno lo llena, que lo que genera es una desunión.  Este es el momento de dejar todo eso atrás, de limpiar el corazón, el pensamiento y el alma. Unirse y construir lazos fuertes donde se pueda contar con el otro sin pensar en cuanto valió, en quien hizo más, en quien dio más, en quien demostró más, cada uno sabe lo que hizo y lo que dio, y vale oro para cada uno, a pesar de que los demás no lo vean, sentirse orgulloso por ser los padres, por ser los hijos y las personas que son ahora. 
Son lo que son por la construcción de sus actos, por las personas que dejan entrar y salir de sus vidas, la familia lo es todo y es la que siempre estará ahí. Demostrar lo que se piensa y siente, así el otro sabrá cuanto lo amas, cuanto lo valoras y que sería de tu vida sin esa persona.
Nos duele tu partida, té extrañamos montón, pero sé que estas en un lugar demasiado puro, te lo mereces, descansa en paz, sé que nos envías tu energía y tu poder para que cumplamos con todos esos sueños, por los cuales nos levantamos y nos motivamos a darlo todo en esta vida
Nosotros entendemos que no vas a estar de cuerpo, pero tu alma está en cada uno de nuestros corazones y cada vez que queramos y necesitemos de ti, sé que vas a estar ahí para nosotros para escucharnos, y entendernos como siempre lo hacías; es un orgullo que hayas pasado por nuestra vida, te amamos con el alma entera. Eres y siempre serás el mejor abuelo de todo el universo. Por siempre tu.

Autora: Alejandra Mosquera.

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