Un Regalo Del Sol. - Vhope.

Inigualable.

Una sola palabra para definirlo a ÉL.

Esa palabra sería: "Inigualable"

Porque no hay nada parecido a él, desde su rostro hasta su personalidad. No hay nadie que pueda compararsele.

Ni siquiera llegarle a los talones.

Porque Kim TaeHyung es superior, superior a cualquiera sin ni siquiera intentarlo. Eso es lo que yo pienso, eso es como yo lo siento, él es perfecto, maravilloso y único.

Su forma de acariciar mi piel dejando retazos de caliente ardor en toda ella, un caliente ardor que puede explotar mis nervios y llevarme al éxtasis. Sus manos apretando mi cuerpo, juntandolo con el suyo o simplemente acariciándolo, con eso puedo sentirme eternamente bendecido y muy agradecido. Porque sus toques son una maravilla traída entre los mortales, llenando a mi cuerpo de infinidad de emociones que se pueden declarar desconocidas para la ciencia.

Su voz grave, con palabras dulces y amorosas, que llevan todo amor y pasión en cada una de ellas. Solo melodías y sonatas salen de esa preciosa y deliciosa boca. Tiene el don de que cada palabra salida de sus labios sea dicha de forma única y especial, que transmita exactamente lo que él desea con esos labios de exquisito sabor... Sus labios, en su punto perfecto, no demasiado carnosos, no demasiado delgados, simplemente perfectos.

Y besarlos es todavía mejor, juntar nuestros labios es el paraíso, con miles de sabores explotando en mi boca, miles de nervios que no sabía que tenía siendo acariciados, miles de sensaciones de las cuales no sabía su existencial, miles de colores a mi mundo en un fugaz momento, dónde solo nuestros labios se juntan.

Mágico y precioso. Esa es la definición de besar a Kim TaeHyung.

Su sonrisa, esa maravillosa combinación de dientes perfectos y labios dulces; cuadrada es su sonrisa, sin embargo, es inigualable también. Con solo verla puedo sentir mi corazón acelerandose, esa sonrisa siendo la definición de mi felicidad. Porque ese es un regalo de su parte, su sonrisa iluminando mi corazón, llenando de calidez mi pecho, rozando cada fibra de mi alma para llenarla de luz y pasión.

Porque él es un ser de pura pasión, un ser hermoso lleno de actividad y belleza. Un ser considerado perfecto.

Porque todo aquello que pueden llamar imperfecciones en él aquellos que no lo conozcan, yo puedo decir que eso es lo que lo hace simplemente perfecto.

Vacíos, los vacíos llenados de mi corazón con solo su presencia, sin palabras, sin susurros, solo silencio y más silencio, un vacío lleno con solo su respiración y sus latidos.

Pasé mis dedos por su rostro durmiente, se ve hermoso. Suspiré fuertemente, sus párpados cerrados y su respiración tranquila le daban un toque angelical a todo su ser. Entrelacé nuestros dedos y acaricié su mano con delicadeza, su piel estaba pálida, no era buen signo.

Podía escuchar sus latidos, más no por su corazón, un monitor decorando la habitación brindaba el irritante pero a la vez tranquilizador sonido de que mi amado está bien.

Llevé su mano derecha a la altura de mi rostro y con parsimonia la besé, delicadamente pasé mis falanges por los contrarios, su suave piel canela siendo ahora mismo solo cálida y pálida. Mi corazón retumbaba dentro de mí pecho el cual se mantenía en constante dolor de ver a mi adorado chico de sonrisa cuadrada.

Mis ojos fijos en toda su anatomía, nuestros corazones sincronizados y nuestras respiraciones chocando, sin embargo, yo era el único que lo sentía. Una enfermera entró interrumpiendo mi momento de admirar al precioso ángel, se dedicó a revisarlo y hacer su expediente. Luego se retiró tal cuál como llegó.