Diferentes Mundos.

Capitulo 11. El salvador.

Cuándo _____ pudo volver a ver a Tendo su preocupación se fue por completo.
Las notas se hicieron cada vez más presentes.
"El Martes a las 12 en el edificio más alto de tu ciudad".- decía la última nota que estaba en la cara de Tendo.
Estaba nerviosa, al fin iba a ver a uno de sus almas gemelas, al gracioso, al primero que conoció.

Ese día ____ se tomo el tiempo para arreglarse.
Se puso un bonito vestido y se puso un poco de rimel para dar mejor apariencia a pesar de ser hermosa.
A las 11.30  salió de su casa en busqueda de alguna de sus almas gemelas.
Sabía donde iba a estar uno, pero uno nunca sabía si en su camino se iba a atravesar alguna.

-¿Estás listo?- preguntó la abuela de Sakusa a lo que Ushijima asintió.-  Has entrenado demasíado para esto, ten buena suerte.

Ushijima no fue capaz de encontrar caminos por medio de los lunares.
Simplemente no conectaba con ellos.
Así que lo único que podía hacer era intentar seguir su hijo rojo.

Mientras tanto Tsukishima seguía el intentó de amuleto mágico que hizo con Hinata.
Esa cosa parecia servir como una brújula.
-No es tan idiota como pensé.- se río Tsukishima al recordar al número 10 correr detrás de la gallina que perseguía al Rey. -¿tú que haces aquí?

-Karasuno.- saludo ushijima.

-¡NO PUEDE SER ESE IDIOTA...!- estaba a un segundo de llamarle a Hinata y decirle lo inútil que era.

-¿Te parece bien buscarla juntos?

-¿Tengo otra opción?- suspiró molestó.
Ambos usaban su método para encontrarla mientras que se hacían compañia y parecían ir al mismo lugar.

-Solo falta que encontremos al loco de Shiratorizawa en lugar de ella.

-¡TENDO!- se detuvo ushijima recordando al pelirojo.- Cómo no lo pensé antes.

-¿Qué cosa?

-Puede ser muy Tonto... pero él ya sabía donde encontrarse con ella.

-Eso no puede ser posible.- se rió Tsukishima.- No hay forma de comunicación con otras realidades.

-Creí que Tendo ya había perdido la cabeza, pero cada canción que ella cantaba era porqué Tendo la pedía.

-Hola.- saludo la femenina al ver al pelirrojo.

-Así que tu eres la pervertida.- se rió antes de comenzar a hablar con ella.
Ambos se veian de forma borrosa, ninguno estaba fisicamente o espiritualmente en el mundo del otro.
Pero la voz de ambos era demasíado clara y podían distinguir la figura del contrario.
Tendo no paraba de hacer reír a ____, y a Tendo le gustaba la risa de esta.
Era como música para sus oídos.

-Sabes... tenemos que hablar sobre nuestros mundos.- dijo ____ arruinando el momento.

-Lo se.

-No quiero arruinar el momento, pero ¿Qué vamos a hacer?

-Sabes.- habló serio Tendo.- Uno de mis mejores amigos también es tu alma gemela, por lo tanto también es la mía...

-Ushijima.- recordó la pequeña a lo que él asintió.

-¿Sabes que le pasa a las demás almas gemelas?- ella ahora ansitio.- No quiero que eso le pase a él, no me importa si le pasa al rubio de Karasuno... pero Ushijima es el único amigo que eh tenido y yo sentí el "Click" del que todos los libros de historia hablan contigo.

Ella también lo había sentido.
Ella tenía miedo.
No quería irse y dejar su vida de lado.
Pero tampoco quería que él lo hiciera.
Ninguno de los dos debían sacrificar a su familia, sus amigos, su vida.

-Nunca eh escuchado que alguien haga esto, pero... ¿y si ninguno va a la realidad del otro? de esta forma mi amigo no se sumergirá en la miseria por no estar a tu lado.

-Me parece perfecto.- sonrió ____.- Eres demasiado dulce.

-Te vere en 15 años mi pequeña pervertida.

-Lo mismo digo Tendo.- dijo al ver como la "ilusión" de él tomaba su mano y depositaba un pequeño beso en ella.- Ve y cumple tus sueños, enamorate, se feliz.

-Lo mismo digo pervertida.- rió al recordar la cara de la femenina al saber lo que decía la canción que tanto cantaba por culpa de su amiga.

Un destello de luz se hizo presente y la figura de ambos se hizo más clara.
Tendo había sido el salvador de millones de almas gemelas.
Almas que no eran capaces de encontrar a su otra mitad.
Y todo eso era porque Tendo tenía un corazón puro e inocente.
Para muchos Tendo esta Loco, es infantil o simplemente temen de él.
Pero Tendo acababa de renunciar a su mitad para que su mejor amigo fuera capaz de cumplir sus sueños.
Tendo a pesar de ser ignorante de las leyes que unía a cada universo había comenzado algo nuevo.
Algo que muy difícil sería de romper.

-Siempre estarás en mi corazón pequeña pervertida.- rió.- Y no dejes de cantar esa canción, uno nunca sabe si te puedo volver a escuchar.

El tiempo se estaba acabando y las imagenes de ambos estaban volviendo a ser borrosas.
Pero por lo menos tuvieron la oportunidad de verse, de aprender cada detalle de la cara del otro para que vivieran en sus memorias.

-¡TENDO!- fue lo último que escuchó la femenina.
Al parecer los otros dos chicos no corrieron con la misma suerte de Tendo.
No la pudieron conocer.
Y sus métodos de busqueda dejaron de funcionar por completo en ese momento para siempre.