Tres años habían pasado, el tiempo de Saori se estaba acabando, la oscuridad estaba acabando con ella.
En el bosque cercano al hogar donde ahora vivian, Shaina entrenaba a Koga cada día, desde el amanecer hasta el atardecer. Shaina soltó un golpe hacia el rostro de koga, pero a diferencia de los otros días, koga logró esquivar el golpe le asestó uno a ella. la peliverde lo miró sorprendida, él al darse cuenta de su acto, se detuvo de golpe asombrado, en todos sus entrenamientos, jamás le había querido hacer daño a su maestra, por esa razón, nunca esquivaba los golpes ni los devolvía, aunque eso causara la furia de la amazona.- yo... lo siento mucho, Shaina, no quería...- empezó a disculparse al ver el gran daño que había causado. se dio la vuelta y se fue corriendo. Saori observaba todo de lejos, se acercó a Shaina con cautela, esta al darse cuenta de la presencia de la diosa, se arrodilló.
- no es necesario, Shaina- dijo Saori amablemente, la amazona se puso de pie - ¿cómo va Koga? -preguntó la pelimorada, ambas empezaron a caminar por el bosque, mientras Shaina le contaba a Saori sobre Koga, este se preparaba para ir a ver Seiya.
- tiene un gran poder, de eso no hay duda, pero su corazón aún sigue siendo noble, no es capaz de dar un golpe certero, aunque bien podría acabarme en unos instantes...- declaró Shaina.
- tiene el mismo poder y espiritu que seiya- dijo Saori sonriendo, Shaina asintió, no sólo se parecían físicamente, también su espíritu era el mismo.
Koga entró a la habitación donde Seiya estaba, todos los días iba a verlo, le platicaba todo lo que pasaba, todos deseaban que Seiya despertara pronto, Marte no tardaba en recuperarse entonces vendría por Athena...
"hola de nuevo, Seiya" guardó silencio un momento antes de continuar " herí a Shaina hoy, no sé como pasó, simplemente cuando me di cuenta ya lo había hecho..." le contó, deseaba que Seiya se levantara y le dijera qué hacer en cada momento... "desearía que estuvieras aquí, igual que Aria..."
[SANTUARIO DE MARTE]
- vamos, hay que encontrar a Athena- decía una niña pelirubia, no pasaba de los 12 años de edad y de nombre Vanessa.
- ¿ella está aquí?- preguntó otra niña, ésta tenía el cabello castaño, a su lado iba otra niña de cabellos verdes, las tres tenían puestas máscaras que ocultaban sus rostros de ángel, Josephine y Emily.
- eso dijo papá, dijo que encontrariamos a la señorita Athena en el santuario- dijo Vanessa recordando las palabras de su padre.
- entonces debe estar aquí- dijo Josphine resignada, habían estado caminando y escalando por más de una semana, Emily ya estaba muy cansada, su condición física no le permitía hacer tantos esfuerzos...
- Jo... estoy cansada- comentó la pequeña.
- sólo un poco más, Emi, ya casi lo logramos- sonrió Josephine para consolarla, finalmente llegaron a la sala principal, con mucho cuidado siguieron buscando a Athena, revisaron cada rincón hasta encontrar un pasadizo, entraron en él rogando no ser vistas, afortunadamente en la sala principal no había nadie.
- si necesitas algo no dudes en decirme- escucharon decir a una joven, era Melisa quien salía de la habitación de Aria. las tres niñas se ocultaron rápidamente, aún asi fueron vistas. - quien quiera que sean, salgan de ahí ahora!- ordenó con voz autoritaria, Josephine fue la primera en mostarse, dejando a Vanessa y Emily atrás - identificate- ordenó ella.
- Josephine de cerberus, busco a la señorita Athena- dijo ella con una mirada fría. Vanessa salio detrás de ella.
- Vanessa de scutum- Natalia se sorprendió por el valor que tenían aquellas niñas al llegar hasta ahí.

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orgullo de un padre saint seiya
Fanfictionesta es una historia alterna a saint seiya omega, en esta historia seiya no es absorbido por la oscuridad , él se queda al lado de Saori para cuidar del pequeño Koga espero que lo disfruten