Va a venir!
— Solo voy por mis cosas Ovidio —dije sería
— Si ya se —dijo desde el otro lado del teléfono
— Bueno pues adiós —dije y le colgué
Ovidio y yo no terminamos bien que digamos. Todo porque no me hizo caso pero bueno. Me puse un vestido corto color rojo y unos tacones negros, después de esto voy al antro. Salí de mi apartamento y me metí a mi carro. Manejé hasta llegar a la casa de los tumbados. Me baje y camino hacia la puerta.
— Va a venir! —escuchó a Ovidio
— Compa solo por sus cosas —dijo Nata
— No es que ella me tiene que perdonar y regresar conmigo, ella es mi esposa, mi mujer, y nadie me la puede quitar —dijo Ovi
Y es verdad, Ovi y yo nos casamos porque mi padres no querían que estuviéramos juntos. Andábamos bien hasta que todo cambió desde que entro a Rancho Humilde. Entre a la casa.
— Y entro como si fuera su casa —dijo Junior bromeando
— Verdad que si puedo Nata? —pregunte como niña chiquita
— Claro que si mija —dijo Nata riendo
— Vez —dije sacándole la lengua— Ovidio —dije sería
— Podemos hablar por favor —dijo Ovi
— Para que o que? No tenemos nada de que hablar Ovidio —dije sería
— Mujer, si tienen de que hablar —dijo Nata
— Tú no te metas Rubén —dije sería
— Okay okay —dijo Nata
— Perdóname —dijo Ovi
— Okay te perdono —dije normal
— Entonces? —preguntó Ovi
— Entonces que? Te perdono pero no significa que voy a regresar contigo —dije sería y de repente sintió unas manos en mis caderas y unos labios en mis labios
Se que era Ovi, el sabor a mente, que amo tanto, pidió acceso para meter su lengua en mi boca y yo se la di.
— No mas sintió los labios del Ovi y ya regresó —dijo Junior
Me separé del Ovi y me quite mi tacón y se lo aviente.
— Con mucho amor de mi parte —dije sonriendo falsamente y regrese a mi beso
— Entonces? —pregunta el Ovi
— Entonces cállate y bésame —dije y el beso de nuevo
— Y ahí está chicos no se enamoren y ni se casen —dijo Nata riendo
— Cállate el hocico pendejo —dije sería
— Perdón perdón —dijo Nata riendo
— Entonces? —volvió a preguntar Ovi
— Ovidio nunca nos divorciamos —dije mirándolo
— Si es cierto —dijo sonriendo— Les dije que todavía era mi mujer —dijo con una sonrisa y pasó su brazo por mi cintura
— Cuídala porque es una mujerona —dijo Nata mirándome de pies a cabeza
— Cuidado Rubén porque te parto tu madre —dijo serio
Amo a Ovidio, llevamos casados desde ya 6 años es y será el amor de mi vida.
444 palabras
Holiii
