BROTHERHOOD

PRIMAVERA II

¡Olita de mar! 

¡7 meses, 7 meses sin actualizar esto! me mamo. Fijé la meta de subirlo en noviembre y a poco menos de dos días de que se acabe el mes, podría decir que lo logré. (La verdad es que lo quería hacer en agosto pero lo pospuse y así...)  A mi defensa estuve haciendo otros cositos y ya saben que organizada no soy ¡pero bien, ya estamos aquí!

Espero que no sea muy pesado de leer y alguien se acuerde de que va la historia, yo tuve que leer el primero para ubicarme. La dinámica es la misma que en el anterior, hay dibujitos de escenas que me gustaron. Quisiera hacer mas, pero me encuentro limitada por mis habilidades :v además de que estuve intentando con otra clase de coloreado y pues ahí va.

Quiero mucho a los norteños (antes les decía los brother, pero el mame es grande) y espero hacerlo bien con ellos, trataré... de no tardar tanto en actualizar pero honestamente no prometo nada XD 

Muchas gracias por leer :) cuídense mucho.

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TAREA PARA LOS CACHORROS

Miró por la ventana nuevamente. Una estela de luz atravesaba el cristal reflejando la sombra de los árboles en el piso junto a sus pies descalzos que se balanceaban. Uno, dos, uno, dos, arriba y abajo, meciéndose cada vez más lento. Bostezo, apoyando su rostro sobre el dorso de su mano, mirando la ventana, las sombras, la luz, las cositas voladoras que levitaban en el reflejo y que seguía con la vista hasta perderlas en las esquinas.

Sasuke leía en voz alta a su lado, firme. Su voz suavecita lo arrulló, le gustaba porque se parecía al tintineo de una campanita. Bostezo de nuevo, sus pies ya no se balancearon con el mismo ímpetu, uno... dos... uno...arriba... abajo... Su padre lo llamó, su voz también le gustaba, era tersa y segura. Lo escuchó hablar y percibió el eco cada vez más lejos, más suave, hasta que el mundo se quedó en silencio.

Una caricia recorrió su cabello, desde la frente hasta la punta de sus orejas, le gustaban esas manos, adoraba sentirlas en sus mejillas; el cariño descendió y subió nuevamente. Entre sueños escuchó el eco de la voz de su padre y una risita traviesa amenizando el tiempo. Quería quedarse ahí, disfrutando de los rayos de sol, de la caricia, de la risa cada vez más lejana de Sasuke. ¡Ah! Pero nada es tan simple. Naruto despertó aturdido, un tirón malicioso estremeció su pequeño ser. Al abrir los ojos, Minato sonreía enternecido frente a él y Sasuke jugaba con sus orejas de bestia, daba tirones chiquitos y juguetones para despertarlo.

— ¿Q-que?... — titubeó mirando hacia todas partes.

— ¡Despertaste! — celebró su padre. — no debiste ser tan rudo Sasuke, solo te pedí que lo movieras un poco — agregó con diversión.

Sasuke dejó las orejas del pequeño zorro, sonrió suspicaz y volvió a su asiento, en el pupitre blanco a un lado del de Naruto.

— ¡Me dormí! — afirmó apenado.

—Otra vez — añadió Sasuke irónico, con su rostro apoyado en la palma de su mano.

—El sol me da sueño — renegó el chiquillo, estirando su cuerpo.

Minato negó sonriendo, era la tercera vez en la semana que Naruto se quedaba dormido durante las lecciones de la mañana.

—Ya, ya niños, daremos por terminada la lección de hoy. —Cerró el libro que llevaba en las manos y lo colocó en el escritorio a su lado, frente a la ventana de cristal que usaba como pizarrón. Naruto dio un saltito del pupitre, Sasuke en cambio cerró su libro con cierta molestia y resopló inconforme. — Pero... — agregó con malicia. — tendrán una tarea.