Valientes

Mí vida con Danzo Shimura

Hoy, se cumple un año desde que partí de la aldea, hoy hace un año que no veo a mis amigos, a mí familia...

Debo confesar que este año a sido duro y no solo por permanecer alejada de todos..

Desde que salimos de la Aldea, Danzo no ha hecho otra cosa que entrenarme con puño de hierro. Si antes creía que los entrenamientos de Tsunade-sama eran terribles, comparados con los de Danzo, son el paraíso.

El primer día hizo que varios de sus subordinados me atacarán, eso no me habría supuesto un problema si no fuera porque me habían bloqueado el chakra y únicamente me dieron un Kunai para defenderme, los muy malditos por poco y me matan; me fracturaron algunas costillas, rompieron un brazo y golpearon por todos lados.

"Agradezco saber ninjutsu médico, de lo contrario habría muerto apenas salí"

Pero dejar ver mis habilidades como medic-nin solo me empero las cosas ya que cuando Danzo lo descubrió, ordenó a sus subordinados no contenerse.

Ese fue mí entrenamiento por 1 mes, defenderme y atacar sin usar chacra, tratando de sobrevivir en el proceso...

El segundo mes, me fueron agregadas un par de pesas en las piernas y brazos. Aún hoy me preguntó cómo hizo Lee para soportar todo aquello, apenas pude moverme con ellas, me llevo dos semanas acostumbrarme, dos semanas en las que nuevamente mí vida estuvo en juego.

En el tercer mes, me agregaron más pesas pero para entonces ya me movía mejor y no me costó tanto. Sin embargo, el luchar a ciegas sí. Esa vez mí entrenamiento consistió en pelear y defenderme con los ojos vendados...

Los meses siguientes fueron parecidos, siempre entrenando y siendo llevada al borde de la muerte, pero eso no era lo que más me preocupaba sino el hecho de que todos mis entrenamientos son para enfrentarme a un poseedor del sharingan y eso me daba mala espina.

Al parecer Danzo me esta preparando para enfrentarme a un Uchiha...

"Eso jamás ocurrirá"

Y con ese pensamiento regreso a la casa donde nos estamos quedando.

- Ya regresé - informe al entrar pero nadie me respondió, lo cual me parecía raro ya que Danzo había dicho que no iría a ningún lado, incluso había dado el día libre sus subordinados.

Curiosa fui hacia su habitación y toque un par de veces, llamándolo

- Danzo-sama

Pero seguía sin responderme. Dubitativa abrí la puerta y asome la cabeza pero no encontré a nadie. Supuse que había salido, sin embargo, cuando giró la mirada hacia el baño, veo que la puerta está entre abierta y en el suelo del baño, Danzo estás inconsiente.

Inmediatamente mí lado médico sale a relucir y acudo en su ayuda. Como pude lo trasladé hacia la cama, pues era demasiado peso para mí pequeño cuerpo, así que tuve que utilizar bastante chakra.

Al revisarlo, comprobé que se había hecho un profundo corte en la cabeza, producto de la caída; fuera de eso no presentaban otra herida, por lo que hice un chequeo minucioso, descubriendo que algo andaba mal. Sus redes de chakra estaban alteradas, tenía algo que bloqueaba la circulación normal de la misma, esto había provocó el desmayo.

Volví a revisarlo para comprobar mis sospechas y luego fui a la cocina para prepararle una infusión ya que lo más probable es que se despierte con dolor de cabeza y mareos.

Iba entrando nuevamente a la habitación con una bandeja en donde traía una taza de té y algo de comer, cuando veo a Danzo incorporándose; rápidamente me acerque a él y dejando en la mesita de Luz la bandeja, lo detuve de los hombros, recostándolo de nuevo.