CRISTIAN © [ACTUALIZANDO]

Despertar

Las personas murmuraban y para mí era un insignificante ruido, muy molesto.

Tener desarrollado todos los sentidos no era algo asombroso después de todo.

"Los príncipes", así se nos llamaban.

Éramos un grupo demasiado misterioso, nadie sabía cuánto tiempo llevábamos en aquel pueblo y mucho menos cómo es que habíamos aparecido. Pero lo que sí sabían es que éramos demasiado importantes como para que la gente de "Duiss" nos respetara.

—¿Por qué llevan esas capas mamá?

Mike detuvo su paso, al igual que mis hermanos, eso sólo significaba peligro para ese niño y su madre, quien temblaba y mordía su labio para evitar llorar.

—Hoy no Mike, los reclutas no pueden esperar tanto tiempo—Darean hablo en su lengua natal, el latín.

Un idioma que muy pocos dominaban.

Asintió con la cabeza y nuevamente empezamos a caminar hacia el psiquiátrico. Llevábamos un siglo buscando al séptimo integrante de nuestro grupo, sin embargo, todos eran tan débiles que en la fase tres morían o terminaban por quedarse en el rango más bajo, los servus.

Nadie llegaba a la fase cinco y Meissa empezaba a tener un enojo contra las personas que se encargaban del proceso para reclutar a chicos y chicas para que fueran miembros de la familia.

Aunque su verdadero propósito era vengarse y eso nadie lo sabía. Su compañero de vida Hugo había muerto en manos de los humanos por el descuido de un novato, quien aún seguía vivo recibiendo los castigos de nuestra ama.

Pero esto nadie lo sabía, solo ella, yo y la oscuridad.

La puerta se abrió, poco a poco fuimos entrando a un cuarto donde se hallaban tres chicos sentados en una silla.

—¿Estos son los que han pasado la prueba tres?—Sasha se quitó el gorro de su capa, revelando a una joven preciosa.

Uno de los chicos empezó a toser y decir cosas fuera de lo común.

Luna volteo los ojos y en un parpadeo el chico que tenía el número dos dejó de respirar, ella le había disparado.

—Tu turno Liliana.

La enfermera asintió y rápidamente empezó a leer los expedientes de los chicos.

—El chico número uno es Tavo Hurón Finn, tiene diecisiete años, es hijo de una familia es rica, se cree que murió por los bandidos y fue reclutado por el servus 1678, ha pasado las cuatro fases sin molestia alguna, la posibilidad de que sea un príncipe es de un noventa y cinco por ciento—La cabeza de la enfermera cayo al suelo.

los dos chicos empezaran a temblar y los servus, solo mantenía su cabeza en alto, tenían miedo. Por suerte su parte humana solo se apoderaba de ellos por unos minutos, después su bestia incompleta volvía a tomar poder de su conciencia.

—¿Seguirás matando a todo el que te plazca Luna?—Sasha sonreía, mientras se dirigía a una de las camillas para acostarse.

—Me aburro, Meissa termina con esto ¿Quieres?

—¿Cómo se llama el número tres?