Maldito (y atractivo) egoísta [Tn×Atsumu Miya]

.[48].

Perdón, me hicieron falta MUCHAS ideas, así que prometo que el próximo será más largo de lo normal.

Y este cap va a ser más como para recordar momentos importantes, ya que no se me ocurrió mucho más que esto, mil disculpas.

A pesar de todo, espero que lo disfruten :'3

•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~

-Narra (////)-

Ya en 2 meses, me iré de Japón para cumplir mi nuevo sueño de ser cantante en New York, y ya debo empezar a hacer las cajas.

Lo sé, faltan 2 meses todavía, pero lo mejor será empezar desde ahora y dejar los muebles vacíos al final, y tener unos últimos días libres para pasarlo en Sendai de vacaciones con mi familia y los últimos aquí en Hyogo, ya que me iré en el mismo vuelo que mis cosas.

Voy a empezar por las decoraciones más importantes de la casa para mi, luego las de mi habitación.

[...]

-Ya está -suspiré, dejando la última caja en la esquina de la sala.

Subí de vuelta a mi habitación para empezar a guardar las decoraciones que tengo en mi cuarto, pero al entrar vi inmediatamente a mi viejo violín.

Suspiré por la nostalgia y lo tomé con delicadeza.

-Luego de mudarme, lo más probable es que lo deje para siempre -me dije a mi misma-.

Y no había falta de lógica en mis palabras, porque cuando llegue a Estados Unidos, me concentraré totalmente en mi voz, ya que mi nuevo sueño no es ser violinista, es ser cantante.

-Una cantante japonesa trabajando en New York, vaya incoherencia

Lo puse sobre mi hombro y tomé el arco, para comenzar a tocar una de las mejores melodías que he podido tocar.

-Es triste cómo ver que una persona que fue tan cercana a ti puede llegar... a ser un total extraño...

Las lágrimas amenazaban con salir, pero me contuve. No pienso llorar por un patán como Atsumu.

No volveré a pensar en él más que como un conocido, un imbécil.

No pensaré en sus ojos marrón, lo alto que es, su risa cuando se divierte, su linda sonrisa, sus labios...

Carajo, maldito subconsciente.

-Demonios -murmuré sacudiendo mi cabeza, intentando alejar dichos pensamientos.

Me senté en la cama y acaricie las mantas, trayendo recuerdos a mi mente.

[...]

-Atsumu, despierta, (////) se despertó y su padre ya volvió -llamó Samu a Tsumu, intentando despertarlo-.

Cuando abró los ojos, lo primero que vió fue a mi sentada en la cama, y cuando se dio cuenta sonrió y se lanzó a abrazarme.

-¡(////), estás bien!

Se dio cuenta de lo que estaba haciendo mientras aún ne estaba abrazando, así que inmediatamente me soltó.

-¡Pe-perdón! -era muy tierno verlo sonrojado-.

-Descuida no tengo problema. Muchas gracias por cuidarme Atsumu