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Mayo: ¿Dices que no ha salido en 5 días?

Mike: ¡Así es!

Mayo: Fue por mi culpa, y-yo... yo sabía que esto tendría consecuencias

Mike: Mayo, no te sientas así, o dime, ¿tú fuiste el que intentó conquistar a Víctor?

Mayo: N-No, él simplemente se acercó a mí

Mike: Entonces no hay razón para que Acenix te odie, ¿ok?

Mayo: ¡Pero sí fui yo!

El peli-morado se cubrió la cara

Mike: Ay Mayo...

Para tratar de consolarlo un poco, Mike puso su mano sobre su hombro

[...]

El peli-gris despertaba por la mañana. Se sentía mal aún, con los ojos algo rojos e hinchados por todo lo que lloró y sollozó. Se miró en el espejo del baño, notando su cabello desordenado, y la característica antes mencionada en aquellos bellos ojos verde lima. Decidió por fin salir, y hacer las cosas bien, no sin antes arreglarse. Tomó una ducha y se puso su vieja ropa, que tanto amaba

Se miró nuevamente en el espejo, y vaya cambio. Aunque notaba su propia mirada, y como cambiaba. Ya no reflejaba ése particular brillo feliz que tenía, ahora sólo quedaba unos ojos en los que se notaba frialdad y seriedad. Tampoco es que Acenix se haya vuelto gruñón o algo por el estilo, sino más bien, ya no actuaba tan feliz como antes, que es distinto. Sin más, comió un pescado entero y tomó un poco de leche

Compartiste tu cuerpo
Como una máquina expendedora

Salió de su casa, y se cubrió un poco los ojos por la luz, a pesar de que el cielo estaba nublado, y empezaba a llover levemente. Se refugió debajo de un árbol, en el cual se sentó a sentir la fresca brisa que golpeaba su rostro. Cerró sus ojos y movió sus orejas y cola, en señal de una tranquilidad incomparable. La lluvia no tardó en escucharse caer, formando algunos charcos en las calles, o incluso en el césped mismo

Simplemente oía el impacto de las gotas con el suelo, el cual lo calmó. Quedó pensando en todo lo que haría después de su ex-novio Víctor. ¿Hablaría las cosas con Mayo?, ¿volvería a dirigirle la palabra a Víctor?, ¿al menos Víctor volvería a hablarle? Todas ésas preguntas rondándole la cabeza. Al sentir que la lluvia se detenía un poco, se levantó de su lugar y comenzó a caminar por las calles, pisando los charcos que la lluvia había dejado. Al igual que se puso su capucha, la cual tenía igualmente orejas de gatito

Todo iba tranquilo, hasta que...

Víctor: ¡Espera, Acenix!

Odio la forma en la que actúas relajado
Mientras yo estoy aquí quemando mis sábanas

[...]

Al llegar nuevamente a su casa, se sacudió el agua que le había caído. Fue adentro a revisar si el de ojos verdes había dejado algo, ya que en los 5 días que estuvo en su habitación, no revisó si el castaño se había llevado todas sus cosas. Checó cada rincón de su casa, hasta que entró a su propio cuarto y vio por ahí la guitarra de Víctor. Ésta venía con una nota

Acenix, te dejo ésta guitarra solamente. Espero que no me extrañes. Porfa, cuídala bien
- Atte. Víctor

El peli-gris al ver eso, se llenó de una rabia incontrolable. "¿Ni siquiera una disculpa?" pensó. Tomó la guitarra e investigó en su teléfono los precios mínimos que éstas tenían. Al notar que el clima era un poco más tranquilo, salió con la guitarra en mano, y... creo que ustedes saben el resto, ¿no?

Presente...

El atardecer finalmente era apreciable en el oscuro cielo de los días pasados. Mayo y Acenix paseaban por las calles

Mayo: Em, Acenix

Acenix: ¿Ajá?

Mayo: S-Sinceramente, creo que deberías tratar de hablar con Víctor

Acenix: ¿Por qué lo dices?

Mayo: Es que aunque sé lo que hizo, al menos está tratando de hacer el intento por disculparse, ¿no crees?

El de ojos verde lima dio un suspiro. Su amigo tenía un punto, el castaño se había tratado de disculpar con distintas cosas, pero ninguna de ellas las había aceptado. Pensaba un poco las cosas, ya que aún así le tenía odio al de ojos verdes. Pero sí, sabía que tarde o temprano debería hablar acerca del tema con su ex-pareja acerca del asunto

Acenix: ¿Sabes qué?, sí, ya es hora

Mayo: ¿¡D-De verdad!?

Acenix: Sí, ya es momento de hacer las cosas así, no puedo mantener ésta clase de enojo con él por siempre, y al menos quiero tratar de dialogar

Mayo: Eh, si quieres yo lo digo que te vea, y donde

Acenix: ¿Me ayudarías con ése favor?

Mayo: Claro, es lo menos que puedo hacer por lo sucedido

Acenix: Aww, gracias Mayo

Ambos se abrazaron y  separaron al corto momento. Se despidieron como el día anterior y partieron por rumbos distintos

[...]

Víctor: ¿En la plaza, estás seguro?

Mayo: Sí Vic, de verdad

Víctor: Pero es que aún no lo entiendo

Se sentó en un sofá

Víctor: ¿Qué debo decir para que me perdone?

Mayo: Víctor...

Se sentó junto a él y lo tomó de las manos

Mayo: Simplemente di algo como "perdón", has intentado tantas cosas, pero en ninguna dices que de verdad lo sientes, sólo actúas como si nada hubiese pasado

Víctor: Entonces, ¿crees que sólo debería decir que lo siento?

Mayo: ¡Sí!, eso es todo lo que él quiere oír

Víctor: Vale, gracias

Con una sonrisa, el de ojos verdes le dio un beso al de visor, el cual correspondió al gesto

[...]

Ya era de noche, aunque no se veía tan oscuro. Acenix salía ya de su casa, en dirección a la plaza, al igual que Víctor, quien estaba practicando lo que diría. A ambos les invadía un sentimiento de nervios, más al castaño, porque encima sentía miedo. El clima nuevamente era fresco, y el aire golpeaba con un poco de fuerza, lo que de un modo aumentaba la tensión. Al llegar, ambos se vieron cara a cara

El ambiente era algo incómodo sinceramente. Ninguno decía nada, sólo un simple "hola" por parte de los dos. El mitad gato sólo veía serio a su ex-pareja, mientras que el de ojos verdes trataba de evitar contacto visual. Unas simples palabras por parte del híbrido fueron lo que dio inicio a la conversación

Acenix: Me Enfermas

Mickey Valen & Page - Sick [Vicnix/Mayictor]Where stories live. Discover now