18.

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-¿A dónde quieres ir ahora?-Preguntó Error.

-Bueno... ¿Por algo de comer?- Respondio Ink.

Ambos caminaban por las calles juntos. Recién salian del cine y estaban tan tranquilos y a gusto que no querían irse ya a sus casas. Aún no era de noche, por lo que estaba bien.

-¿Te gustan las crepes?-Preguntó Error.

-¡Sí!-

-Pero bueno, ¿Entonces prefieres postre que comer?-

-Es que son crepes...-

Error rió levemente.

-Tranquilo, puedes comer lo que quieras.-

-¡No! Ya te dije que yo invito.-

-No puedo dejar que me invites, va contra mi moral.-

-¿Qué moral?-

-Bueno, ya sabes. Quizás la idea de una cita fue tuya. Pero, mi moral es consentirte. Tú solo disfrutas.-

-Awww, ¡Eres tan tierno! Pero, yo tengo dinero.-

-Me preocupa ese hecho. Incluso compraste asientos de primera clase...-

-¡Y aun me sobra! ¿Quieres que te compre un carro?-

-¿Qué...?-

-¡Es broma!... Creo.- Murmuró lo último.

Incluso Ink comenzo a dudar de la cantidad de dinero que tenía. ¿De verdad Mafia le dió tanto dinero? Pero bueno, la vida está para vivirla.

-De cualquier manera, dejame invitarte las crepes.-

-Bien, ¡Pero solo eso y ya!-

-Por supuesto, ya que despues de eso no gastaremos nada más y solo disfrutaremos de tiempo juntos tu y yo.-

Ink no podía ganar ante eso. Realmente, al ver a Error tan cariñoso, solía pensar que todo era un sueño.

¿Cómo pudieron mejorar las cosas de repentes?

¿De verdad era Error quien le estaba tomando de la mano y discutiendo por quién invita la comida?

¿El mismo Error que le dijo que no eran nada y que se alejara?

Le preocupaba demasiado eso. Que en cualquier momento vaya a despertar y... Volviera al mismo infierno de antes, volver a vivirlo.

-¿Kiky?-Aquella voz que le sacó de sus abrumadores pensamientos, parecía ser real. Unos ojos preocupados que solo le veian a él. -¿Estás bien?-

Deseaba tanto que no fuera un sueño.

-Yo... Estoy bien.- Ink sonrió viendole.

-¿Estás seguro? Te veía algo... mal.-

-¡Estoy bien, tontito! Solo te necesito a tí para estar feliz.-

Error sonrió, aliviando su expresión y su corazón preocupados.

-Es bueno oirlo.-

-Entonces... ¿Aún iremos por las crepes?-

-Sí.-

-¡Genial! Entonces vamos.-

Ink se iba a adelantar, pero Error seguia a un paso lento, tomandole la mano, hasta que se detuvo, haciendo que el menor hiciera lo mismo, viendole sin entender su acción.

-¿Ruru?-

-Antes de ir por las crepes...-

Error se acerco, lo tomó por las mejillas delicadamente para luego besarlo tiernamente, con cuidado, como si fuera lo más preciado en el mundo.

No solamente Ink tenia la preocupación de que todo fuera un sueño, también Error. Quien tenia miedo de volver a soltar la mano de Ink, tenerlo lejos, perderlo.

Quizás si nunca se hubiese ido, quizás si jamás lo hubiese dejado solo, si hubiese hecho más...

-Te amo, Kiky.- Susurró Error, a la vez que se separaba del beso.

Un leve rubor adornaba las mejillas de Ink.

-Te espero en el puesto de crepes.- Dijo Error para luego comenzar a caminar hacia el lugar predicho.

Ink siguió alli, helado, aquello le habia tomado desprevenido. Quizás habia besado a otros antes, y hecho varias otras cosas, pero... Por alguna razón, era diferente, especial, único.

-¡E-Esperame, tú!- Dijo al reaccionar, comenzando a perseguir a Error.

Al lograr alcanzarlo, Error le dio la mano, mirandole con una sonrisa.

Sí, habia sido el momento perfecto.

No era necesario ser bajo la luna, o en la mitad de un campo de flores con mariposas volando alrededor.

Simplemente era necesario que fuera en un momento especial para los dos.

Un momento donde ambos sepan que lo necesitaron.

Pues cuando sucedió, todas sus dudas y miedos por fin se desvanecieron.

Fue especial.

Ámame[ErrorInk]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora