Hasta que las estrellas se apaguen
«los ojos siempre le pertenecen a la persona que los hace brillar» Un accidente. Una pérdida. Y un alma rota. Tras aquella horrible noche de lluvia, Ámbar sufrió un accidente junto a su padre. Aquél accidente le dejará una marca permanente en su cuerpo y su corazón. Tras varias semanas, Ámbar tendrá que verse obligada...