"Cosas como el propósito de la vida, destino, amor verdadero, felicidad eterna y esas cosas estúpidas, nunca me pasaron por la cabeza. Yo vivía encerrada metiéndome en problemas constantes sobre todo con los hombres. ¿Porqué? Simplemente porque los hombres era unos detestables. A pesar de haber salido con chicos, NUNCA, me había enamorado de algún tipo, sólo me gustaban, pero no los amaba. Desde hace un año al único chico que siempre tenía presente en mi cabeza era, al parecer, un amigo de la infancia. Ni siquiera podía recordar su nombre o su rostro, pero muy constante soñaba recuerdos con él, tenía curiosidad sobre que había sido de aquel niño" Zusumi vivía como cualquier otra chica. A pesar de hablaba cerca de cuatro idiomas, el meterse en problemas era como el oxígeno para ella, era necesario para vivir. Se había mudado muchas veces debido al empleo de su padre. Muchas personas atribuían su mala personalidad debido a la falta de "amor" maternal, ya que a la edad de 6 años su madre murió.