1, 2, 3... cuento mentalmente mientras trato de acompasar mi respiración pero al abrir los ojos ya no está, se ha ido.
Y al igual que el cometa más brillante que ha pasado por la tierra, desapareció en la infinita oscuridad de la noche.
1, 2, 3... cuento mentalmente mientras trato de acompasar mi respiración pero al abrir los ojos ya no está, se ha ido.
Y al igual que el cometa más brillante que ha pasado por la tierra, desapareció en la infinita oscuridad de la noche.
El maldito NTR pocas veces hace justicia por los protagonistas que tienen ver a sus seres queridos siendo poseidos por otras personas, pero ¿Qué sucedería si esa historia no termina allí? ¿Qué pasarí...