Carla lleva toda su vida siendo la hija perfecta, estudió lo que su padre quería, su novio Pedro es el hijo del mejor amigo de su padre, trabaja en una prestigiosa empresa como contable, sigue todos sus horarios y siempre coge el bus a las 10:15 pm. En ese mismo bus siempre se encuentra con una desconocida, siempre se sientan solas sin dirigirse la palabra en la parada de buses, a veces la escucha discutir por teléfono, otras sólo le parece oírla murmurar cosas enfadada. Pero esta desconocida siempre huele a sudor y a Carla hay veces que le entran ganas de pedirle que se duche en el trabajo o bien, prestarle algo de desodorante. Nunca se imaginaría que acabaría dentro del maletero de un coche, secuestrada y atada junto a esa desconocida inconsciente a su lado.