Prólogo: Victoria Stander era una hija normal, de un no tan normal vecindario llamado Standville, sus padres parecían unos dictadores rotundos con el pueblo, la mujer perdía autoridad y la religión era estricta en todos los echos, cansada de vivir este tipo de prisión , decide salir a dar una vuelta a los alrededores, lo que se encuentra a las afueras es meramente desconcertante. Un titiritero de nombre Gerard Way roba las almas de los desdichados, en un espectáculo siniestro con sus cuerpos sin vida ¿Pero será posible enamorarse de el monstruo que controla su mundo junto con ella?