Desde que ellas llegaron a mi familia mi vida se fue a la mierda, pusieron a mi padre en mi contra, contándoles mentira tras otra que supuesta mente hacía, no importo cuantas veces lo negara, lo desmintiera, siempre, toda y cada una de esas veces le creyó a ellas y no a mi, a su propia hija, su sangre. Hasta que me canse y deje de defenderme, deje que me volvieran la oveja negra de la familia. Nada de lo que ellas decían o se inventaban de mi me importaba, nada. Hasta que él llegó.