Las estrellas brillaban mucho más de lo que se podía apreciar en la ciudad, ese era el encanto del vivir en el bosque. Nuestra chica, recostada en el césped, levantó sus manos, intentando alcanzar las estrellas; sonreía calidamente, disfrutando de la compañía de esos chicos que se habían tomado el tiempo de estar con ella esa noche. Con una voz serena y baja, esperando no molestar a ninguno, comentó al aire: "Pues igual y la vida no es tan mala..." ><><><><><><><><><>< Esta historia es una mezcla entre 3 universos totalmente diferentes, es solo una experimentación para mi escritura, no lo lean si no quieren... Debo decir que avanza lento, pero esto es poliamoroso. Si les gusta la historia, espero que me apoyen dandole estrellita y dejando comentarios.