En Arlong convivían hechiceros con simples mortales, diferenciados los unos de los otros por una característica: el color de sus ojos. Los de los primeros eran azules mientras que los de los segundos oscuros. Sin embargo, Evelyn Wood, una joven de dieciséis años la cual vive en una aldea junto a su familia, no es poseedora de poderes pero tampoco tiene los ojos marrones, si no dorados ¿Por qué ella es tan distinta a los demás? ¿Qué secretos le oculta el reino en el que vive?