El rey de Creta le exige anualmente a los atenienses, pagarle como tributo siete doncellas y siete jóvenes para alimentar al Minotauro. Teseo, hijo del rey de Atenas, se ofrece como tributo para así matar al Minotauro y liberar a su pueblo. Ariadna se enamora de él y decide ayudarlo, traicionando a su padre. El joven ateniense le jura a la princesa que la ama. Sin embargo, cuando Ariadna duerme una voz le sugiere desconfiar de Teseo.