Ella solo necesitaba atención, ser amada, valorada, arriesgando su vida por todos. El mundo entero guardaba silencio en tal acto de valentía, y nadie se había dado cuenta de que ella es la causa de la cual París sigue en pie. Ni las hermosas canciones de cuna de su hermana puede calmar el enojo que sentía, ¿era tan difícil ser querida? La segunda Ladybug se lo preguntó. Guardó silencio y los trozos cayeron incrustándose a su piel, acercándose al alma rota siendo perseguida como víctima del destino dejándose llevar a lo llamado oscuridad. ¿Con qué fin?... Quería la atención que tenía Bridgette al ser las dos heroínas de París. Portada hecha por: @Idkcost