Desde el principio, desde ese ya mismo les quiero agradecer a todos los que invierten dosis de tiempo para leer estas líneas, ya que el tiempo es invaluable para muchos, espero que mis mejores agradecimientos pueda hacerlos llegar al que dedicó y dedicará sus ojos y atención a esta presentación. 

Imaginativo. Mi percepción terrenal me ancla a mi realidad. Ser realista con tanta imaginación es complicado, porque a la hora de juzgar pormenores y hechos que nos envuelven busco el lado lógico y las soluciones más apropiadas pero cuando mis manos empiezan a hilar palabras, lo que me gustaría en bastantes ocasiones es sentir y ver las cosas como las escribo.

Me gusta inventar relatos cortos. De esos que cuando uno los lee intenta imaginarlos y comprenderlos, y ya de cada quien depende su ambigüedad. No soy un catedrático de la escritura, solo me gusta poner en práctica mis dimensiones emocionales, retratar lo que tengo para decir y no puedo olvidar. Cada momento que transcurre es una historia más, por ello cada vez que puedo me doy a la tarea de anotar en mí teléfono móvil lo que mi mente va tramando.

Me agrada pensar que todos tenemos palabras escondidas sin decir.

Actualmente tengo 28 años. Estudiante de Historia.
La escritura me atrapa, me atrae, me encanta. Lejos de mi campo disciplinar cuando tengo la oportunidad suelto un rato los análisis empíricos que mi cátedra me exige y desenvuelvo mi vida, en historias que quizás, a más de uno nos ha ocurrido. Espero traer todo lo que mi imaginación me permita y maravillarlos con lo mejor.

¡Qué empiece el viaje!