-¡¿Por qué?! -gritó sin importar quienes las escucharan.
 -Porque no soy lo suficiente para lograrlo, no lo soy, lamento haberte ilusionado. Sabes no soy lo que tú piensas, no soy esa chica que está conforme con su cuerpo, con sus amistades e incluso con su familia. Me cuesta entablar conversaciones por pensar que no les voy a caer bien. Seguro dirás "Oye, no estés así", "Yo siempre estaré a tu lado", muchas personas me lo dijeron y mira -dijo señalando su alrededor con su brazos- no están.
 Ella sintió que un nudo se formaba en su garganta, pero quería ser fuerte y se lo tragó.
 -Yo no soy como los demás -murmuro para sí misma.