"Con respecto a la cuestión de la sexualidad y las relaciones de pareja, se puede plantear una interesante teoría que, si bien se sustenta en premisas poco fundamentadas, merece ser analizada desde una perspectiva académica. El argumento se basa en la premisa de que la elección de un compañero sentimental del mismo género conlleva un grado de homosexualidad, mientras que la elección de una pareja del género opuesto presenta una manifestación heterosexual. No obstante, esta teoría propone que la inclusión de actividades o comportamientos tradicionalmente asociados al género opuesto equilibra y modifica la naturaleza de la orientación sexual experimentada en dichas relaciones.
En primer lugar, se plantea que un individuo de género masculino que opta por establecer una relación con una persona de género femenino asume una conducta que podría considerarse como femenina, lo cual se argumenta como un factor determinante de homosexualidad en un porcentaje del 50%. Se sugiere que, al participar en actividades y comportamientos tradicionalmente relacionados con el género femenino, dicho individuo estaría desviándose de la norma establecida por la sociedad y, por lo tanto, experimentaría una atracción hacia personas del mismo género, en este caso, su compañera sentimental. No obstante, para evitar una clasificación exclusiva y reconocer la existencia de una relación heterosexual, se propone que esta manifestación de homosexualidad se contrarresta y se equilibra en un porcentaje igualitario del 50%.
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