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TURRÓN TORCIDO PRESENTE_ semeapagoelpiloto_
  Nosotros tenemos esa extraña capacidad de reincidir con total insensatez en cosas en las que no somos bueno, y lo hacemos simplemente porque podemos hacerlo. Es decir, nunca vas a ver a un oso intentando volar o a un colibrí intentando construir una represa con tronquitos; ¿por qué? Porque se dan cuenta, porque entienden sus limitaciones. Nosotros no, nosotros insistimos, y así nos va.
   Este humilde servidor, por ejemplo, sigue con sus fútiles y fracasos futbolíticos, y solo para reafirmar cada vez que no, no sabe jugar, y que sí, que es un gil con dos pies izquierdos. Pero voy a seguir eh, retroceder nunca, rendirse jamás, mal que les pese a mis compañeros de equipo.
    Pero eso no es todo: aquí en la secundaria me anoté en el coro del colegio solo porque a fin de año se iban a Bariloche; tenía la gracia musical de una locomotora del Tren de Las Nubes atropellando un cantero lleno de maceteros de hojalata, pero no me importaba. El tema es que a mitad de año se suspendió el viaje, con lo cual mi presencia ya carecía de todo sentido, pero Turrón torcido, tal era mi apodo musical, siguió yendo. ¿¡Para qué?! Después me di cuenta, pero hubo gente que sufrió dos meses más de lo necesario por mi odisea.
   Y por si hiciera falta otro ejemplo, qué mejor que este que están leyendo: hace dos años y medio que insisto en escribir pavadas diariamente como si tuviera el talento y, además, como si tuviera proyección económica. Decí que están ustedes, que practican a diario el masoquismo literario, que si no...
 En fin, peor es ser de Boca. Ah, yo soy de Boca. Listo, mátenme ya mismo :v.
   ATTE. RAMIRO SÁNCHEZ_ SALUDOS Y EN HORA BUENA PARA TODOS.