Capitulo 8 "Cada vez en más problemas"

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Unos días después, seguí investigando la criatura que nos había atacado, pregunté a unos compañeros y descubrí un libro de criaturas fantásticas, se llamaba casi igual "Animales fantásticos y dónde encontrarlos" habían una infinidad de animales, desde los unicornios hasta criaturas que nunca había visto antes, en el libro encontré la información de la criatura que nos atacó, decía que es un "RedBear" u "Oso mágico" ahí dice la espinas de su espalda pueden desprenderse a voluntad del oso, crecen rápido y no lástima al oso hacerlo, además son venenosas al contacto humano

-Que bueno que no nos tocó con sus espinas

-Por su puesto, no hay del remedio para eso en la escuela

No lo había notado pero el otro chico estaba en la misma mesa de la biblioteca, era el niño famoso, no recordaba su nombre

-¿Enserio? Si van a tener eso en la escuela deberían de tener por lo menos la cura

-Eso mismo creo yo, pero es muy difícil de conseguir, es una sustancia Nomag que nadie sabe su composición... La Coca-Cola, creo que le llaman

-Jajaja, no mam... ¿Enserio? Hay una en cada tienda por lo menos, ¿porque no salen y compran varias? Además saben delicioso, luego te llevo por una, Potter

-Deja eso para mí padre, dime Fred, pues aún así no fué necesario, Por cierto ¿En qué pensabas al liberar al RedBird, ¿No sabes que esa creatura es ola masita de uno de los magos más peligrosos que exciten? Y estaban guardandola par que no supiera su ubicación, pero seguro que ahora ya saben

-¿¡Y porqué carajos lo tienen aquí!? Llevenlo a África o algo así

-¿Estás loco? Si BlackChest consigue a su mascota podría controlar a aquien sea, su polvo hipnótico y la magia de ese mago perverso son una peligrosa combinación

-Pero es muy peligroso que lo tengan en la escuela, si se llega a liberar... Ouuu, soy muy baboso

-Los profesores están tratando de interrmpir esa conexión, como lo hace el cofre pero es una propiedad única de ese cofre

En eso vi a Connor entrar a la biblioteca acercándose a la zona prohibida así que le hablé sin saber sus intenciones

-Por algo es la zona prohibida Connor

Por reacción me volteó a ver y se sentó en la mesa al lado de Fred muy nervioso

-Ehhh si, es que quería leer unos libros de magia avanzada, no le digan a los profesores eh jejeje

-No te preocupes, no sabrán

No sé porqué pero a Fred parecía desagradarle Connor, no le dí mucha importancia pero se empezó a sonar la voz del director Fontaine en la biblioteca

-A todos los alumnos, favor de reunirse en el salón principal para un importante aviso

-¿Cómo es eso posible?

Me causaba mucha intriga, no se porqué me sigo sorprendiendo si de seguro es un truco mágico que se escuche el director sin que haya altavoces o megáfonos

-Es un hechizo, pones la varita en tu garganta y amplifica tu voz, aunque con practica se puede hacer que se escuche en un radio de distancia como si estuvieras ahí

-Genial, tú sabes todo de esta escuela Connor, vamos, no me quiero meter en más problemas

Fuimos al salón común y nos sentamos en nuestros lugar siendo de los últimos en llegar pero cuando llegaron todos el director Fontaine y los profesores aparecieron en la mesa de profesores, los profesores sentados y el director en un atril

-Como ya muchos sabrán hubo un accidente recientemente que fué controlado pero no resuelto, la criatura que fué libera era un pricionero muy peligroso, más si está suelto, aún sea por 5 segundos, deben saber que esa criatura tiene una conexión psíquica muy fuerte con el famoso y peligroso mago BlackChest, quien logró saber la ubicación de la escuela gracias a la liberación de la criatura

Connor en ese segundo sonrió y agitó su puño como festejando pero antes de poder analizarlo escuché que alguien alzó la voz

-¡Muchas gracias Cervantes!

Ay no puede ser, el baboso me gritó eso y todos me vieron feo, yo me tapé la cara tratando de discimular

-¡Silencio! No es culpa de su compañero Ignacio, los profesores y yo no debimos mantener el cofre en las instalaciones así que solicitamos ayuda al Magico congreso de Massachusetts para que mantuviéran guardia y protección en la escuela, nadie saldrá de las instalaciones y los partidos de Qwuidich quedan cancelados

Todos empezaron a abuchear y quejarse cuando el profesor dijo eso y yo me sentí cada vez más mal, pero Connor trató de reconsiliarme

-No hagas caso, no es tu culpa, ¿Para qué ponen algo tan peligroso en la escuela? Solo lo hacen más fácil.

-Gracias

El director calló a todos y volvieron a poner atención pero yo traté de pensar cómo resolver mi error, después de la reunión fuí a mis clases correspondientes pero al acabar el día me escabullí a la biblioteca para investigar sobre las conexiones psíquicas, por esos días empecé a practicar muchos hechizos mientras veía a los magos del Mágico congreso de Massachusetts venir y hacer guardia dentro y fuera de la escuela, un día caminaba por los pasillos de la escuela cuando de repente el muchacho que me había dado mi varita se apareció y me embistió metiéndome a un cuarto del castillo, parecía el cuarto del conserje

-Al fin te encuentro chamaco escurridizo, dame la varita

-Oye espera ¿Cómo me encontraste? ¿Se supone que la escuela está protegida por hechizos y los magos del Mágico congreso de Mass..

-Si si si, eso no importa, dame a la dama o si no te haré daño

-Ajá ¿Como cuando me salvaste de los cholos de ese pueblo?

-¿Qué? Oye no estoy jugando, ¿Sabes cuánto tiempo dormí por ese hechizo de tu estúpido papá?

-Él no es mi papá

-Bueno, me dejó dormido como por una semana y además mi jefe no estaba muy contento cuando llegué sin la varita, no debí de usarla pero me obedeció, nunca me había obedecido, a él tampoco pero le gusta, así que pude enterarme de como entrar a la escuela y te localicé, ya estoy hablando de más así que tomaré la varita y me iré, muchas gracias

El chico empezó a inspeccionarme y tomó la varita y trató de salir del cuarto pero algo detuvo la puerta, luego lo intentó otra vez y se abrió y al final del pasillo vi a Connor corriendo y dar la vuelta pero le presté más atención a el chico y extendí mi brazo

-¡Ey! ¡Accio varita!

La varita regresó a mi mano y esto impresionó a el chico quien solo se me quedó viendo

-¿Te hizo caso? Wow ¿Tú?

-¿Yo qué?

-Chamaco, carajo, ahora sé porqué me hizo caso, solo me usó para llegar a ti

-Bien, genial, es mía, ahora vete, mañana tengo clases y ya estoy en muchos problemas como para que me metas en más

-Muy tarde...

El chico puso su varita en mi frente y quedé dormido, no recuerdo nada hasta llegar a una casa como de arena pero sólida, estaba esposado y habían muchos cholos y pandilleros en el lugar pero había un señor gordo y trajeado sentado enfrente de mi con vino en su mano y mi varita en la otra, me miro y se me acercó

-¿Con qué tú eres quien se robó mi varita?

Ilvermorny, Memorias De IgnacioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora