Número equivocado

Television

Cada vez que lo hacemos mi deseo es más insaciable.

"Últimamente no tienes tiempo para mí." Se quejo la de ojos azules sentada en el sillón de la esquina de mi oficina, suspire ignorando aquel hecho. "¿Podríamos por lo menos hablar un poco? Cada vez que nos vemos solo es para sexo."

"No tengo tiempo para eso." Conteste mientras seguía escribiendo los informes que debía entregar para la próxima reunión con mi equipo.

"Claro, ser esposa de la jefa no es fácil." Boscha suele tener mucho tiempo libre, después de tener muchas complicaciones en la carrera que escogería terminó eligiendo el deporte como primera opción. Aunque no se lo toma tan en serio cuando no tiene jugadas que sean importantes para su carrera, ya que siempre las gana.

"Sí. Así que deberías de irte y dejarme trabajar, me estás distrayendo." Después de aquello solo escuche el sonido de su ropa caer al suelo, levante la mirada por primera vez en todo el tiempo que ella llevaba aquí dentro.

"Esta es la única forma en que tengo tu atención, ¿Cierto?" La media sonrisa y voz pícara de ella me hizo saber que no podría continuar con mi trabajo hasta que le diera lo que quería.

El amor es una perdida de tiempo.

Regresando a casa la señora de limpieza me aviso sobre la visita de mi hermano, era extraño que él viniera a casa o siquiera entablara una conversación conmigo. Después de todo, cada uno de nosotros habíamos tomado caminos muy distintos. Supongo que sería algo de importancia.

El sonido de la televisión me guió a la sala, en donde Edric dormía plácidamente en la alfombra con comida en la mesa a medias.

Los años parecían no afectarle, seguía actuando como un adolescente sin preocupaciones.

Normalmente no tengo interés alguno por la televisión o programas de entretenimiento que no aportan conocimiento importante a mi vida. No obstante, en la pantalla se presento una noticia que nunca en mi vida había imaginado. Una que después de tanto tiempo me recordo lo que fue mi pasado.

"¡Con ustedes la increíble y magnífica maga Luz Noceda." El presentador de cabellera rubia abrió sus brazos dándole la bienvenida con aplausos del público. La cámara enfocó una pequeña caja morada en el suelo, incrementando su tamaño suficientemente grande como el de una puerta. De ella salió la morena recibiendo muchos más aplausos.

"Es un gusto estar aquí con ustedes." Se inclinó levemente y sonriendo dio las gracias por el cálido recibimiento. Por un momento sentí mi corazón acelerarse, esos ojos color chocolate miraban directo a la cámara y sentí la extraña sensación de ser observada.

Debe ser una maldita broma, justamente de las pocas veces que veo la televisión ella es la que está ahí. Después de tantos años sin saber sobre Noceda, enterandome que ella es ahora una maga reconocida y que incluso aparece en programaciones como esas.

Pero la sorpresa más grande es el extraño interés que tuve al verla de nuevo, el deseo de querer saber más de ella y quedarme embobada viendo hasta el final la entrevista.

Había algo mal en mí.