Then, I met you (translated)

Capítulo 2

El vuelo a Chicago fue rápido. Sin embargo, debido a problemas técnicos mi avión hacia New York fue retrasado. Sabía que sería duro hacer escala antes de irme a Londres, pero no podía permitirme el lujo de negarme. 

Mi avión salió de Chicago con cuarenta y cinco minutos de retraso. Aterricé en New York a las 1.45 PM, justo a la hora exacta cual mi vuelo a Londres estaba programado para salir. Afortunadamente, una azafata avisó de mi llegada. Me dejaron salir del avión la primera y prometieron dejar mis maletas en el gate correspondiente. 

Corrí por el la pasillo en dirección al aeorpuerto pricipal. Mientras corría hacia mi puerta de embarque, me di cuenta de la presencia de un gran grupo de personas con cámaras marcharse del lugar. Tardé un segundo en reconocerlos: Eran paparazzis. 

"Bien" -Pensé para mi misma. Nunca verías a un paparazzi en Omaha. 

Cuando llegué a la puerta correspondiente no había nadie. La zona estaba totalmente desierta; excepto por una señora en el mostrador. Sonrió a la vez que me acercaba.

"¿Martha Skyler?" -Preguntó con una ceja alzada. 

"Sí" -Jadeé, aún reponiendome del sprint. 

"¿Billete?" -Le extendí mi billete, el cual, por cortesía de mis padres, era de primera clase. 

"Sígueme, por favor" -Me guió hasta el pasillo del avión, cerrando la puerta tras de si.

Encontré mi asiento, y con él, a un chico riéndose junto al joven que tenía al lado. Aclaré mi garganta y me atreví a preguntar.

"Uhm, perdón, ¿este es el 12B?" 

"Oh, sí" -Un joven rubio de extraños ojos marrones me miró. Su acento era distinto, pero no inglés. Sinceramente, no sabía cual era-. "¿Es tu asiento? Solo estaba hablando con mi amigo. Estoy justo en frente" 

"Si. Creo que sí... No pretendía interrumpir" -Murmuré mientras sonreía levemente.

"Oh, no te preocupes, guapa" -Rió a la vez que salía del asiento-. "¿Te ayudo?" 

"¡Claro!" -Guardó mi equipaje. 

¿Por qué los extranjeros eran tan caballeros y los Americanos no? 

La voz de mi cabeza se echó a reír. No es de extrañar que me estuviera yendo.

"Lo siento por lo de antes" -Una profunda voz me sacó de mis pensamientos justo al sentarme. Me había olvidado por completo de aquel chico de al lado.

"Oh, no te preocupes por eso" -Le sonreí dulce y educadamente. 

El muchacho tenía el pelo de color rubio ceniza y unos preciosos ojos azules. Su rostro se iluminó aún más cuando sonrió. 

"Soy Oscar" -Dijo. Su acento era cada vez más evidente. 

"Martha" -Sonreí, en vez de tomar la mano que había puesto frente a mí. 

Justo entonces la voz de una de las azafatas resonó por toda la sala, ordenando que apagáramos cualquier dispositivo móvil. Rápidamente desbloqueé mi iPhone y envié un mensaje a Sophia y Meg.

"¡Los primeros cinco minutos en el avión hacia Londres y ya he hablado con un chico guapísimo y me siento al lado de otro! Los dos tienen acento. Punto para mí" 

"Aquí el capitán" -Una voz retumbó por todo el avión- "Podéis sentaros, relajaros.. y, sobre todo, ¡conocer a la persona de al lado!. Vais a estar juntos durante seis horas y cincuenta minutos"

Los ecos de las risas de los pasajeros resonaron por todos lados. 

Siete horas al lado del chico sueco. Quizás, la suerte estuviera de mi lado después de todo.