Dear Love[Lukanette]

La chica que es dueña de mí corazón

Anoche soñé contigo...otra vez.

Me encanta hacerlo, despierto feliz, ya que la mejor parte es saber que no solo estás en ellos.

Me contaste que eres su amiga de nuevo.

Tu corazón tiene espacio para perdonar tantas cosas, siempre admire eso.

No mentire, siempre estuve celoso de el.

Tuvo el valor de hacerlo primero, tuvo algo que te enamoro primero.

Hoy pude ver qué no soy el único enamorado de ti.

Solo que esta vez quiero ser el primero.

Y si estas cartas funcionaron aunque sea un poco...por favor, dame una oportunidad.

Ya estoy listo para que me veas.

Me gustaría verte, en el lugar donde nos conocimos, dónde contamos estrellas juntos, dónde te encontré y me enamore de ti.

Donde te regale la púa de Jagged Stone.

Donde puedo llamar tu atención y decirte cómo me siento con las notas de mí corazón y la guitarra.

Donde espero pueda ser la mejor noche de mi vida.

Donde te proclamaste dueña de mí corazón sin saberlo.

Te espero, Marinette.

-L

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Juleka recibió a su amiga con una sonrisa, su madre le ofreció algo de beber y luego le indico que Luka estaba en el balcón.

La azabache camino hasta allí con nerviosismo, no esperaba descubrir que el anónimo de las bellas cartas era su mejor amigo.

El sabía exactamente que decir para saber dónde tenía que buscarlo.

Para ella sería la primera vez que lo vería como algo más como amigo, ese momento lo vería como una persona que puede cumplir su deseo.

Una persona que le hizo creer que el amor es posible.

El la estaba esperando sentando en un banco con la guitarra en sus brazos, un ramo de rosas a su lado, y todo el espacio decorado con luces, la azabache sonrió con la escena.

Al ver qué había llegado dejo todo a un lado, agarro el ramo y se acercó un poco a ella para estar frente a frente.

— Si viniste.— dijo con una sonrisa.

— Por supuesto que si, después de todo todavía tengo que decirte mí deseo.—respondio acercándose más a él.

— Quizá pienses que fui un poco cobarde, usando las cartas de esa forma tan cliché, pero todas las formas que se me ocurrían involucraban palabras que nunca me salían cuando deseaba hacerlo.—confeso nervioso entregándole el ramo.

— Quizá pienses que no, pero hay algo que siempre recuerdo, ”Tu eres una chica extraordinaria, clara como una nota musical, sincera como uno melodía, eres la canción en mi cabeza desde la primera vez que nos vimos". Quizá no eres tan malo con las palabras después de todo. Siempre te vi, solo que nunca supiste de que forma.—le recordó animandose a agarrar una de las manos de Luka mientras con la otra sostenía el ramo— Lo leí todo, pero quiero oírlo también. Las palabras que puedan salir las aceptaré.

Luka respiro con calma preparándose por última vez.

— Marinette, estoy enamorado de ti. Estoy enamorado de todo lo que eres y lo que haces, cómo me haces sentir y lo que sueño a tu lado. Quiero mostrarte el amor de puedo darte si me das la oportunidad.—dijo entrelazando su mano con la de la azabache— Quiero ser el primero está vez, por favor.

Marinette emocionada con las palabras de Luka, cortó la distancia entre ellos y beso su mejilla.

— Cualquier persona, capaz de escribir estás cartas, tocar mí corazón con bellas notas en su guitarra, alguien tan amable y sincero, tiene una oportunidad pero sobre todo, cumpliste mí deseo.—respondio abrazándolo mientras acostaba su cabeza en su pecho.

— ¿De veras?.—pregunto, más feliz que nunca, disfrutando el abrazo.

— Mí deseo era, encontrar a alguien que me haga creer que puedo encontrar el amor de verdad, no lo que creo que es. Y desde el momento que leo tus cartas...solo confirmo que eres tu quien se ganó mí corazón.

Luka beso múltiples veces el rostro de Marinette haciéndole cosquillas.

— Te amo, te amo, te amo, te amo enana.—confeso acariciando las mejillas de la azabache, llamándola por el apodo que le había dado.

— Tambien te amo, Luka.