𝘛𝘩𝘦 𝘙𝘢𝘪𝘯. . . [Mexusa One-shots]

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Empty= Vacío.

Imagines sacadas de pinterest, derechos a su respectivo autor.

El sol se veía ocultarse en aquel montículo de césped, la brisa era fresca y serena, se podía sentir la tranquilidad de cualquiera quien estuviera en ese lugar;
desde las flores ser ligeramente empujadas junto con los dientes de león y las hojas de aquel árbol tan grande y cómodo de recargarse, el oxigeno tan fresco que sentías libertad tan solo respirarlo, todo era tan dulce y lindo en ese lugar.

Y más en estos momentos de angustia y dolor, pero, que pasaría si te dijera que incluso en esos momentos de paz, tu mente no puede estar cuerda,
que aunque no hubiese nada que te moleste aún así quisieras llorar sin saber el porque y la confusión reinara en ti.

Lo has tenido todo, realmente no perdiste mucho a comparación de otra gente que vive su vida día a día con infierno eterno...,
Porque?, porque por mas que intentes no puedes saciar tu sed de satisfacción?.

A pesar de vivir activo todos los días, se volviera excesivamente monótona, como si no tuvieras alma, bagas en este mundo con dolor en tu garganta constantemente, como si fueras un zombie,

la diferencia de todo esto..., es que sigues tu rutina diario, la gente no se percata de lo que sientes y lo peor de todo es que aunque se los digas no les importa o simplemente les parece ridículo y que será fácil para ti afrontarlo sin ayuda.

Bueno..., pues bienvenido a mi mundo.

(. . .)

A pesar del ruido constante en la ciudad, para el yankee era como si los ruidos ajenos hubieran desaparecido, lo único que escuchaba eran el caminar de sus tenis al pisar algún charco de agua, su mirada estaba perdida al igual que su mente, pero aun así sabia por donde iba.

De pronto, una gota de agua cayo en su mejilla, llamándole la atención parando al instante, después otra cayo en su frente haciéndolo mirar hacia arriba viendo las nubes grises, oliendo la humedad del aire; unos cuantos segundos después regreso su mirada al frente.

Las gotas empezaron a caer constantemente y en innumerable cantidad, un pequeño resoplido salio de su boca empezando a caminar desinteresado por la banqueta. A estas alturas no le importaba llegar empapado a casa, solo quería llegar a donde había estacionado su auto con anterioridad; de un momento a otro puso atención a la gente de su alrededor.

Viendo como algunos solo abrían sus sombrillas, otros las compartían, los demás solo corrían a un lugar ligeramente seco para cubrirse de la lluvia mientras reían. El americano amaba ver a su gente brindado sonrisas, siempre lograban contagiar lo subiéndole el humor, pero esta vez era diferente solo se quedó apreciando aquellas expresiones con una mueca neutral.