Lunes.
Era un hermoso inicio de semana, los niños estaban jugando en el parque, las parejas salían al cine o una heladería, viejos amigos conversaban entre ellos. Pero no nos vamos a centrar en ellos, nos vamos a centrar en dos chicos, ambos estaban corriendo uno detrás del otro, el primero iba adelante con una apariencia que el cansancio no le estaba haciendo nada, y el otro estaba dando su mayor esfuerzo para seguirle el ritmo, aunque sus músculos no decían lo mismo.
Mirio: ¡Vamos, Midoriya! ¡Solo dos vueltas más!
Izuku: Eso...intento.
Mirio: Si quieres impresionar a las chicas deberás esforzarte más.
Izuku: Esta...bien.
Hoyuelo: Se siente incómodo ver esto.
Los dos siguieron corriendo todo el camino por el parque, hubiera sido posible si cierto chico de cabello verde no se hubiera desmayado a medio camino.
Mirio: Wow, esto será difícil.
Izuku: Lo...siento *Desmayándose*
Mirio: ¡Midoriya!
Después de un rato, ambos chicos estaban descansando en una banca del parque.
Mirio: Lo siento, te sobreexigí mucho.
Izuku: No...se...preocupe *Tomando agua*
Hoyuelo: Tranquilo, es una botella no todo el océano.
Mirio: Esa es la rutina que hago normalmente, por un instante olvide que esto era para ti.
Izuku: Los miembros del club también lo hacen, pero...
Mirio: Déjame adivinar, te desmayabas a mitad del recorrido.
Izuku: Así es.
Mirio: Por eso debes seguir exigiéndote, esforzarte para que así puedas lograr lo que quieres.
Izuku: ¿Lo que quiero?
Mirio: Músculos, Tamaki me dijo que eso querías conseguir.
Izuku: Ya veo (eso era privado) solo no quiero depender de mis poderes.
Mirio: Es una buena acción de tu parte, nadie debe depender de sus poderes, pero eso no lo toman en serio.
Izuku: ¿Ahora qué?
Mirio: Te llevaré a tu casa, ¿puedes caminar?
Izuku: No.
Mirio: Eso pensé.
Ambos terminaron regresando a casa con Mirio cargando al chico al estilo nupcial mientras todos los veían extraños.
Hoyuelo: Esto si es muy incómodo.
Izuku: Cállate *Apenado*
Martes.
En los gimnasios, normalmente son usados para que las personas se ejerciten y así conseguir fuerza y resistencia, otros lo usan para volverse populares haciendo creer que hacen ejercicio, y aquí nuestro chico de cabello verde vino por ambos motivos.
Mirio: Muy bien, vamos a intentar levantar pesas.
Izuku: Esta bien.
Mirio: Probemos con esta.
La primera pesa con la que intentan es de 20Kg, en el momento en que lo coloca en las manos del chico y la suelta, el muchacho termina en el suelo dejando una enorme grieta.
Mirio: (Me van a cobrar por eso) *Sudando*
Izuku: P-perdón.
Mirio: ¡N-no te preocupes! Probemos con esta.
Ahora lo intentarían con una de 10Kg, nuestro psíquico intenta levantarla y lo logra, solo que hasta ahí puede al no tener la fuerza para hacer una flexión con su brazo.
Mirio: Ahora probemos con esta.
La última sería una de 5Kg, esa fue la única con la que el chico de secundaria lograría hacer una serie de 10 flexiones en cada brazo.
Mirio: Progresamos, creo.
Izuku: No siento los brazos.
Mirio: Entonces intentemos con las piernas, vamos.
Los dos se dirigen a una prensa, donde Izuku se tendría que sentar y levantar las pesas con sus piernas.
Mirio: ¿Puedes?
Izuku: S-sí.
Mirio: Bien, haz lo mismo que con los brazos. Iré por agua para hidratarnos.
Ya estando enfrente del encargado, le pide dos botellas de agua.
- ¿Vienes solo?
Mirio: No, vengo con un amigo.
- ¿Es aquel chico que está siendo aplastado por la prensa?
Mirio: ¡¿Qué cosa?!
Dirige su mirada al chico, el cual estaba siendo ayudado por las personas que estaban cerca de él.
Hoyuelo: ¡Qué alguien ayude a este debilucho!
Mirio: Debí usar menos peso.
Izuku: Estoy...bien.
- ¡Se desmayó!
Miércoles.
En la prestigiosa escuela U.A., el chico considerado como el más fuerte de la escuela estaba siendo castigado por sus amigos.
Nejire: ¡¿Cómo se te ocurre llevarlo a un gimnasio?!
Mirio: Él dijo que quería ser fuerte.
Nejire: ¡Pero eso no significa que le exijas hasta morir!
Mirio: P-perdón (Me va a matar)
Melissa: Togata, entendemos que quieras ayudarlo, pero debes entender que él no tiene la capacidad para resistir lo mismo que tú.
Mirio: ¿Cómo está?
Tamaki: No fue a la escuela, le duele todo el cuerpo como para poder moverse.
Mirio: Así que tengo el día libre.
Nejire: ¡No es así! ¡Vas a ir a cuidarlo a su casa!
Mirio: ¿Por qué?
Melissa: Su mamá está trabajando y no regresará hasta tarde.
Tamaki: Vas a tener que ir.
Mirio. Está bien.
Nejire: Y si me entero que algo le sucedió en tu guardia, a ti te va a ir peor que esa vez cuando arruinaste mi vestido favorito.
Mirio: (Estoy muerto)
El día paso volando, y ahora Mirio se encontraba caminando a la casa del joven Midoriya, al llegar toca el timbre, después de diez minutos la puerta por fin se abrió.
Izuku: Hola.
Mirio: Hola, ¿cómo te sientes?
Izuku: Estoy usando mis poderes para poder moverme ahora.
Mirio: Lo siento mucho, te obligué a hacer algo que no querías.
Izuku: ¿Quién dijo que no quería?
Mirio: ¿Eh?
Izuku: Lo hice para así poder proteger a mi mamá y a mis amigos, por eso quiero ser fuerte.
Al ver la determinación del chico, Mirio ve en él su reflejo de cuando quería volverse un héroe a pesar de su singularidad.
Mirio: Deberás esforzarte mucho, pero sé que lo lograras.
Izuku: ¿En serio?
Mirio: Sí, porque yo te ayudaré para alcanzar tu meta.
Hoyuelo: Sí, ya llegó su funeral.
Fin del Capítulo 13.

ESTÁS LEYENDO
La Vida De Un Psíquico - Izuku x Harem -
ActionEn un mundo de héroes, ¿Cómo son tratados los psíquicos? Izuku Midoriya es uno de ellos cuya vida a tenido que mantenerse en un perfil bajo debido a su situación. El no poder expresar muy bien sus emociones lo ha llevado a un camino difícil en dónde...