T R E C E

520 83 37
                                    

SooBin despertó por la madrugada cuando tocaron su mejilla mientras una voz suave y somnolienta le hablaba.

—Hyung, tengo miedo.

SooBin abrió los ojos, no debieron haber pasado ni dos horas desde que fue a la cama, así que se hallaba algo ido. Frente a él la imagen más tierna que jamás imaginó se le presentaba; Huening Kai frotándose los ojos con una manta alrededor y un par de peluches entre sus brazos.

Si SooBin tenía alguna duda de lo adorable que era Huening Kai, todo rastro de ella había desaparecido después de presenciar tal preciosidad.

Aún sin poder mencionar palabra, SooBin se removió en la cama, haciéndose a un lado en espera que el menor capte el mensaje. Lo hizo y sonriendo se subió a la cama para acurrucarse con ambos peluches abrazados en su pecho.

SooBin podía sentir el latido de su corazón acelerarse.

—¿Ha pasado algo, Hyuka?

Los bonitos ojos del menor se mantenían con la vista abajo.

—Tuve un sueño extraño. 

SooBin colocó ambas manos debajo de su mejilla, acomodándose para mirar con más atención al contrario.

—Cuéntame.

—¿Prometes no burlarte?

—Lo prometo —asintió.

El niño acariciaba sus peluches como si no pudiera mantener las manos quietas.

—En mi sueño caminaba por un lugar en el que estaba atrapado y todo era blanco, las paredes tenían una forma extraña —Kai pausó para mirar a SooBin, quién prestaba atención a cada palabra —. Yo caminaba con temor a encontrarme un monstruo, pero lo curioso es que el monstruo se veía exactamente igual a cualquier humano. Así que en mi huída, no podía confiar en nadie.

>> Pasaba por muchas habitaciones extrañas, que parecían un laboratorio. Y de pronto me encontré a alguien que me dijo que me ayudaría a escapar, no recuerdo cómo era, sólo que su cabello era rojo. Y en cuanto tomaba la mano que me estaba tendiendo, él me jalaba hacia una habitación oscura, en la que caí. Y eso es todo.

Kai se encogió de hombros, ahora con los peluches cubriendo parte de su rostro.

—¿Sabes que pudo haber ocasionado ese sueño?

El niño negó con la cabeza.

—¿Qué crees que fuera esa última persona?

Kai miró a la nada por unos segundos, luego ladeó la cabeza con un puchero —. Asumo que era el monstruo.

—¿Por eso estabas asustado?

Kai asintió, pero Soo en realidad no necesitaba que aceptara la premisa; un sueño en el que estás sólo y perdido y no puedes confiar en nadie sonaba como una horrible pesadilla.

—¿Crees poder continuar durmiendo?

—Supongo que sí.

En realidad sonaba como si quisiera hablar más pero en lugar de hacerlo, Huening Kai se acercó un poco más, con sus rostros muy cerca. Soo alzó la mirada hacia la del menor, quien lo miraba con una sonrisa adorable y mejillas sonrojadas. La tenue luz de la mesita de noche era suficiente para vislumbrar su hermoso rostro.

—Kai, eres muy bonito —balbuceó. Bien dicen que la madrugada no es el mejor momento para hablar, por alguna razón es casi como si estuvieras ebrio, ya que no tienes mucho filtro.

—Tú también eres muy bonito, hyung.

SooBin le sonrió, queriendo creer que no era un cumplido por compromiso para que pudiera emocionarse adecuadamente y pensar que Kai lo consideraba lindo.

Boyfriend [ SooKai ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora