Ojos Miel || Sterek [Terminada]

Capítulo 9» No Todos Somos Iguales

Narra Stiles:

— Vaya... Intenso.

Dijo Masón mientras nos miraba a papá y a mi como si se tratase de un partido de tenis.

— ¿Como?

Cuestiono Peter.

Papá me hizo una seña y ambos hicimos brillar nuestros ojos.

— ¿Pero?

Cuestiono Derek.

— Somos híbridos...

Dijo papá y note que todos los de la manada se tensaron.

— ¿Híbridos?

Cuestiono Chris aterrado.

— Si, pero no como los otros, nosotros si sabemos controlarnos, nunca hemos dañado alguna persona viva.

Dije rápidamente.

— Sera mejor que nos vallamos.

Dijo papá y tenia razón, los híbridos no eran muy bienvenidos, fue estúpido creer que ellos nos aceptarían.

— Esperen.

Dijo Scott.

— ¿Como paso?, es decir no tienen olor a sobrenatural.

Mire a papá que suspiro.

— En Londres hubo un operativo, las personas desaparecían por las noches, creíamos que eran traficantes, Stiles me siguió esa noche, me salvo y yo a el pero estábamos heridos y los demás muertos, cuando acordamos estábamos curados, pensamos que todo acabaría ahí.

Papá se perdió en los recuerdos por lo cual decidí continuar.

— La primera luna llena fue la peor, estábamos asustados, un tipo llamado William nos ayudo esa noche, nos tenia miedo pero no nos dejo, nos enseño lo básico, lo demás lo aprendimos con el tiempo.

Concluí y nadie hablaba por lo cual papá y yo decidimos irnos lo mas rápido que pudimos, teníamos que irnos de Beacon.

Al llegar a casa fuimos a alistar todo nuestro equipaje, era hora de seguir huyendo.

— ¿Ya tienes todo?

Le asenti a papá.

— ¿Nos vamos?

Asintió y salimos, subimos todo al Jeep y nos dispusimos a irnos.

Papá se fue el la patrulla para dejarla en la estación y de ahí de subió al Jeep.

— ¿A donde iremos ahora?

Pregunte preocupado.

— Supongo que a Alaska, estaremos bien ahí por unos meses, enviare un correo de mi renuncia y otro para darte de baja.

Le asenti.

Todo el camino fue en silencio, solo parábamos para comer, esta era mi vida y debería acostumbrarme ya.

— Rentaremos una casa, ¿te parece?

Le asenti mientras intentaba sonreirle.

Estaba agotado, casi una semana sin dormir por estar manejando era cansado, aunque papá ayudaba a manejar cada cierto tiempo.

— Viviremos aquí.

Dijo y nos adentramos a la cabaña.

El lugar tenia aires de hogar pero aun así faltaba algo, en mi pecho podía sentir algo, no sabia que era pero me incomodaba.

— Le diré a William que nos mudamos, ahora dame tu celular.

Se lo entregue, sabia que se desafía de el chip, al igual que el suyo.

— A comenzar de nuevo.

Le asenti y comenzamos a desempacar.

Lo único que me quedaba era esperar a volver a verlo, al menos a la distancia.

— Vamos a cenar.

Espero les guste.

Continuará...