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He perdido la cuenta de las miles de veces que me he quedado en la oficina hasta tarde

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He perdido la cuenta de las miles de veces que me he quedado en la oficina hasta tarde. A veces creo que comienzo a entender un poco las cientos de palabras que te dicen cuando estas creciendo "Disfruta de tu juventud, cuando seas un adulto no tendrás tiempo para estás cosas".

Y cuando cierro los ojos no puedo evitar viajar entre mis recuerdos, quizás suelo dejar que afecte a mis emociones.
Mi cabeza duele, siento como si fuera a estallar, recordar esas palabras que destruyeron todas mis ilusiones solo hacen que el dolor se haga aún más fuerte e intenso.

"Jamás podría amar a un chico, jamás podría ser feliz contigo".

Es como si hubiera sido ayer, como si no hubieran pasado 12 años desde aquella vez. Como si no hubieran pasado 12 años desde que lo vi salir de aquella habitación y marcharse a pasos veloces de mí...

Salgo de la oficina, con un capuchino caliente en mi mano derecha, y con miles de recuerdos que suelen atormentarme día con día.

Hay una leve brisa que cruza los arbustos, la siento en el rostro y me relaja, o eso creo, al menos hasta el momento en que siento como si mi corazón volviera a doler.

Todo este tiempo he tratado de convencerme en que no tuve la culpa, pero sería un mentiroso si dijera que no fui el principal causante de este sufrimiento.

Yo fuí la principal persona que tuvo la culpa en esto, fuí un mentiroso, fuí un egoísta, fuí un cobarde.

Mis párpados se sienten pesados y cansados, cierro los ojos un momento, no siento ningún ruido, estoy absorto en mis pensamientos.

Agradezco al menos enterarme de que no morí por amor, como pensaba, estoy bien al saber que sigo vivo y puedo disfrutar un día como hoy, quizás no feliz, pero lo estoy viendo con mis propios ojos. Sonriendo con una curva en mis labios que parece amistosa a simple vista, pero que por dentro está llena de resentimientos conmigo mismo.

Un olor aturdidor y extremadamente familiar me hace entrar más en mis pensamientos. El olor a canela.

No puedo evitar reír con dolor, jamás imagine que amaría y odiaria tanto un olor. Parece tonto, el olía a un olor demasiado suave, como si fuera vainilla, no ha canela, pero su simple apodo me hacía recordarlo tanto con tan solo olerla.

Me pregunto que hubiera sucedido... si ese día no me hubiera desmayado en pleno pasillo, tratando de alcanzar a alguien que minutos antes me había dicho que me fuera de su vida.

Me enojaba conmigo mismo por haber dicho palabras que realmente no pensaba ni sentía, pero sin duda era un tremendo idiota por haber terminado tirado de esa forma.

Me sentía el hombre más débil del mundo, ¿Quién se desmayaría sabiendo que estás corriendo para impedir que alguien que amas se vaya de tu lado?

Creo que solo yo...

Quizás no hubiera cambiado mucho, quizás hubiéramos tenido el mismo final amargo, pero creo que mi ser se hubiera sentido mas tranquilo al ver como se iba de mi lado, al pensar en un... "Si hubiera", creo que me hubiera sentido mejor al ver con mis propios ojos que Kim Taehyung no era como yo lo pensaba.

ᵢₙₜᵣₒdᵤccᵢóₙ ₐₗ ₐₘₒᵣ [ₜ₂] ₋ ₜₐₑⱼᵢₙₘᵢₙDove le storie prendono vita. Scoprilo ora