Díez

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—Yo sigo perdido cada vez que te veo...yo sigo perdido en todas las cosas que me haces sentir, si me quedo pensándolo son más cosas agradables por eso me gusta perderme en tí — me extendió sus brazos... Y no pude hacer algo diferente a sentarme en sus piernas y besarlo.

Y perderme en sus labios

Y en sus caricias

En los valles de su cuerpo y en su sonrisa, yo también estaba perdido por él, pero sin animos de encontrarme con mis miedos, con mis padres, con la sociedad demandante.

Me perdí entre las sábanas de nuestra cama, si, era la primera vez que la sentía nuestra.

Me perdí entre te quieros y te amos, entre besos, caricias y abrazos, me perdí dentro de él una vez más y aseguraría a cualquiera que si, estaba perdido porque cada vez era nuevo y diferente.

El choque de nuestros cuerpos se sentía y se escuchaba diferente, todo, todo era diferente.

Era muy diferente hacer el amor sin la sensación de que no pertenecía allí.

Si tuviera que buscar algun lugar o sensación que me recordara a Taehyung elegiría un viento suave y cálido, se asemeja a la leve caricia que me da su aliento cuando estoy encima o debajo de él cuando jadea...

Él siempre jadea... El día que nos conocimos en esa reunión aleatoria de amigos que sin sospecharlo nos miramos sin discreción y él me terminó acorralando en uno de los baños.

Él jadeó, jadeó cuando me besó los labios.

Y yo me enloquecí, me enloquezco, me pierdo cada vez que lo escucho.

Y todas las veces a partir de ahí desde que nos encontramos.

Lo encuentro para perderme en la clase de vida que siempre soñé vivir, una vida en la que me esperan en casa con un beso, puedo hacer el amor en la mañana y una sonrisa cuadrada se refleja en la ventana.

Una vida en la que en la madrugada de un primero de enero me encuentro cabalgando sobre una cama y TaeHyung no me suelta, esta erguido conmigo mientras me acaricia la espalda.

—A veces llegué a imaginar que saltaba al abismo de tu mirada— las palabras de Taehyung en mi oreja hacian que su aliento la tocara, la acariciara, me comencé a mover mas lento por su extensión, para escucharlo, era hermoso cuando hablaba así cuando me hablaba a mi...

—Y la falta de gravedad hacia que no me dañara—tomo mis cabellos y hecho mi cabeza hacia atrás para susurrar lo que decía sobre la piel de mi cuello.

—No había forma que me aburriera flotando en la ingravidez de las estrellas contenidas en tus ojos, nadie se aburre observando lo que es hermoso.

—Concuerdo—le respondí, no se componer, no se hablar bonito como él, pero si sé ser sincero—nadie se aburriría de mirar tu sonrisa o de sentir tus caricias—me moví con fuerza, la suficiente para que soltara un fuerte jadeo que se alojó debajo de mi oreja, me apretó con más fuerza y sentí sus dedos apretar la carne de mi espalda y de una de mis nalgas.

—Me encanta la apariencia inmaculada de tu piel, es contradictorio sentirla cálida cuando parece nieve blanca—despues de eso me embistió tan fuerte que deje salir un potente gemido desde el fondo de mi garganta y al parecer a ambos nos gustaba escuchar eso de los dos.

Me recostó y prácticamente me clavó en la cama, hasta que nos perdimos entre las luces de colores de nuestros párpados cerrados y los espasmos de nuestros cuerpos.

—Me gustas tanto...—me dijo mientras aspiraba el aroma de mi cabello y acariciaba los costados de mi cuerpo—sabia que estaba perdido el día que te miré a los ojos, el día que me dejaste tomar tus labios.

—¿Hace cuánto te gusto?

—Desde que te vi.

—¿Hace cuánto me quieres?—solto una risa y se quitó de encima mío.

—No sé... Solo empecé a molestarme más cuando salías con tu novia.

—Ex novia

—¿De verdad le terminaste?

—Si... Yo también he sido cobarde... Y estar al filo me permitió entender que si hay cosas que puedo elegir, que no sean cargas y cosas desgastantes.

—Me di cuenta de que te quiero cuando no puedo evitar ponerme feliz de escuchar eso... Cuándo te extrañaba cada vez más, cuando esperaba a que salieras a buscarme a la sala... Cuando te buscaba inquieto entre el público que rodeaba el escenario ahí me di cuenta de que me perdí.

—Nos perdimos— le contesté y lo abrace.—¿Hyung?

—Mhn.

—¿No te gustaría buscar ayuda para cuando llegue el huracán de emociones?—Seguia llamándome la atención que se dejara llevar tanto.

—Seokjin hyung también me lo ha sugerido... Dice que tengo atorado lo de las muertes de mis padres, yo pienso que es mas bien la pérdida de la esperanza.

Besé su pecho y lo apreté un tris contra mi—Seria bueno que lo pensaras... Puede ayudar el consultar con un profesional.

—Bien está bien, voy a intentarlo, no va a ser fácil, ¿Viste todo lo que me costó confiar en ti?

Besé su mentón y abracé su cuerpo con mi pierna—te agradeceré el intentarlo... Yo me veo un poco superado lidiando con mis propios pedazos...no sabría que hacer con los de Alguien más, me da miedo terminar fracturandote en más partes

—De acuerdo... Yo tampoco puedo hacerte más daño. Ni hacérmelo a mi, voy a intentarlo.

—¿Cuando cumples años?—preguntó casi de forma aleatoria.

—el primero de septiembre...

—Eso fue poco antes de que comenzaras a quedarte de siento aquí...

—¿Porque preguntas de repente?

—queria celebrarlo ya que arruine el mío.

—Pero no dices qu-

—Mis cumpleaños me recuerdan las personas a las que perdí, la añoranza de las felicitaciones que quedaron pendientes... Los regalos que nunca se dieron y los abrazos que me quedé esperando. Pero quiero que sea diferente... Quiero perder mis miedos y me veo tentado a hacerlo contigo.

—Okay... Bien... Me parece bien ¿Amor?

—¿Mhn?—pregunto con una sonrisa boba pero hermosa en la cara al notar ser llamado de esa forma.

—Me alegro de haberte encontrado.

Fin

Gracias por leer esta pequeña y sencilla historia escrita en noches de insomnio.

Buen viento y buena mar!

💜

Perdido [Taekook/Kookv] COMPLETAWhere stories live. Discover now