Cap.12

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-Quería preguntarte una cosa.-Susurró mirándome con recelo. 

Ladeé mi cabeza esperando una respuesta, y cuando estacionó su coche delante de mi casa, me miró de nuevo con una tímida media sonrisa. Le sonreí de vuelta y suspiró.

-¿No te gusta Nancy Allen?

Al escuchar ese nombre, mi sonrisa se transformó en una mueca y bufé con mala gana mirando el techo del vehículo. Me di cuenta de que era de piel de color gris, estaba intacta, y blandita. Levanté mi mano para tocar el techo, y aunque era estúpida, no me apetecía contestar a esa pregunta. Kendall suspiró y me tomó la mano. Observé sus acciones y vi cómo acercaba mi mano a sus labios, para depositar un tierno beso en ella.

-No te gusta Nancy Allen.-Afirmó mirándome expectante. Negué con la cabeza.- ¿Por qué no, linda? Parece una buena chica.

-¿Y tú por qué has cogido una obsesión con la pelirroja teñida? ¿Qué ha hecho para caerte bien aparte de insultarte en esa fiesta, eh?

Dejó que nuestros ojos se conectaran unos segundos y luego soltó una carcajada, soltando mi mano y mirando por el cristal.

-¿Qué es tan gracioso?

-Tus celos.

-¿Mis qué?-Pregunté ofendida.- ¡Mierda, Kendall, no voy a dejar que pienses que soy celosa! ¡No estoy siendo celosa! ¡Ni siquiera soy de esas novias posesivas! ¿Entiendes? Sólo porque haya dicho que esa chica no me caiga bie...

Me interrumpió besándome en los labios. Le seguí el juego, algo cabreada, pero al fin y al cabo, era mi novio y lo amaba como a todo mi ser. Cuando terminó de besarme, se separó y tomó mi cara entre sus manos, negando con la cabeza.

-¿Eres consciente de que te quiero, verdad?

-...Sí.

-¿Te das cuenta de que estás siendo celosa? No quiero que comiences a gritar. Tan sólo te pido que te des cuenta.

-Yo no estoy siendo celosa.-Murmuré mirando sus bellos ojos.

-Júralo.

Suspiré y me deshice de su agarre, quitando la vista hacia mi casa. No podía jurar una cosa que era mentira. Sí, tenía bastantes celos por si a Nancy se le pasaba por la cabeza robarme a mi novio.

-Lo sabía.-Dijo triunfante.- ¡Tienes celos!

-¡Que no tengo celos!-Exclamé nerviosa y me quité el cinturón de seguridad para bajar del coche. Justo cuando estaba por hacerlo, me cogió del antebrazo y me hizo sentarme de nuevo. Lo miré con pesadez.- ¿Qué quieres ahora?

-No te enfades.-Murmuró con un brillo en sus ojos. 

Suspiré y cuando pensaba contestarle, mi nariz me comenzó a picar y solté un gran estornudo. Él se echó a reír de inmediato, y yo pensando lo imbécil que era, volví a intentar salir del coche. Pero nuevamente, no me dejó.

-¿Puedes dejar que me vaya a mi casa? ¡Eres idiota, Kendall!

-Sólo me ha hecho gracia tu estornudo. Creo que es una buena contestación a lo que te he dicho antes.- Negó con la cabeza.- Bueno, va, en serio. No quiero que te enfades. Tampoco que te resfríes.

-Ni estoy enfadada ni estoy resfriada. Adiós.

Salí del coche de mal humor y llegué a la puerta de mi hogar. La abrí con mis llaves y me fijé que mi novio aún seguía ahí, vigilándome y articulando con los labios un "Te quiero". No pude evitar sonrojarme.

Me giré en rumbo hacia mi habitación, una vez más, sola. Mis padres seguían trabajando. Pensé en charlar un rato con Logan por Whatsapp, pero luego recapacité; seguro que estaba con su nueva novia. 

Di un suspiro de fustración y me puse para revisar los últimos mensajes. Había de tres conversaciones.

Mamá me decía que volvería tarde del trabajo y que tenía la cena preparada. Le contesté que me parecía bien. En el grupo de clase del instituto, hablaban demasiado, así que casi todos los mensajes eran de ahí. No me apeteció leerlos. Y por último, estaba... Kendall. Me había enviado otro "te amo" por el móvil.

Le contesté. Tampoco podía dejarlo así.

Carol: Yo también te amo.

Y vi cómo salía el doble tick azul. Lo había visto. Pero el muy imbécil se había desconectado sin decirme nada más.

Spring Breeze {Kendall Schmidt}Where stories live. Discover now