Prólogo

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La luz solar se filtra por una gran ventana en una espaciosa habitación, dando directamente en el rostro de la chica que aún medio dormida, frota sus ojos mientras se adapta al brillo, su largo cabello cian está enrollado alrededor de ella como si de una bufanda se tratase, bosteza tiernamente y contiene su intento por estirarse pues está siendo abrazada por dos fuertes y voluminosos brazos que aunque llenos de cicatrices aún mantienen un tacto dulce y cuidadoso.

Ella realmente no puede creer que hayan pasado ya 4 años desde que se casaron, probablemente nunca lo procesaría por completo, todo parecía un sueño, un vívido y dulce sueño, estaba casada con el actual símbolo de la paz, lo amaba y él obviamente la amaba también, de eso tenía la certeza, después de todo se lo preguntaba cada vez que se despertaban y justo antes de dormir, para estar seguros claro.

Quería estar un tiempo más de esta forma, abrazada, segura y cómoda entre sus brazos hasta que vio el reloj.

6:51 AM

-(Oh no, ya llegó el momento)- Estar casada con Izuku traía un sinfín de beneficios pero a la vez tenía algunos sacrificios pues como símbolo de la paz, los días de descanso son mínimos, obviamente no era tan duro como en los días de All Might pero aún así se tornaba cansado, a pesar de todo él era feliz, le encantaba su trabajo, ella estaba satisfecha, después de todo a sido el sueño de su amado desde que tenía uso del razonamiento.

¿Su esposo hacía bien su trabajo como símbolo de la paz? Todos sabían la respuesta, desde el niño más inocente hasta el villano más desalmado pensaba lo mismo, unos con más entusiasmo que otros por supuesto, si, sin duda es un gran símbolo de la paz. ¿Cómo no podría serlo? Es la verdadera pregunta, Deku era un ejemplo de persona en todo sentido, tenía una gran sonrisa, estaba siempre dispuesto a ayudar, tenía la voluntad de un héroe pero conservaba toda su humildad, era muy confiable y no estaba dispuesto a dejar a nadie atrás además de su gran inteligencia y capacidad de pensar rápido en situaciones problemáticas, pero obviamente eso ya lo tenía desde incluso mucho antes de ingresar a UA, lo que marcaba la diferencia era el poder que lo respaldaba, tenía no uno, ni dos, sino siete poderosos quirks a su disposición, cada uno sumamente útil y también eran manejados a la perfección

¿Batallas cuerpo a cuerpo? Fuerza extrema capaz de destrozar edificios enteros solo usando un dedo

¿Tenía que inmovilizar a un villano peligroso o rescatar múltiples personas? Látigos negros

¿Miedo de no poder llegar a tiempo por un desastre? Detección de peligro

¿Debía llegar a un lugar de difícil acceso urgentemente? Flotar le daba una movilidad casi inigualable, él estaba hecho para esto, nadie lo dudaba.

Y lastimosamente ahora era cuando el gran símbolo de la paz comenzaba a despertarse, siempre puntual a las 6:52 de la mañana, ella podía sentir como esa posición que le otorgaba tanta tranquilidad y protección poco a poco se deshacía.

Izuku se despertaba poco a poco y se estiró comenzando a incorporarse, lo primero que hizo fue voltear a ver a su pareja -Buenos días amor, hoy tampoco sonó la alarma?- El chico se estiró hasta el despertador -Creo que debo comprar otro... aunque el relojero dijo que no tenía ningún problema- Expresó con confusión, se sentó en la cama dejando ver su torso desnudo y haciendo obvio que solo llevaba ropa interior

Nejire en un movimiento desesperado detuvo los movimientos de su esposo abrazándolo con fuerza -Umm cariño quédate un poco más por favor...- Ella se encontraba con un ligero camisón azul pastel que la cubría hasta debajo de los muslos.

El peliverde se acercó más a ella y le acarició la cabeza como si de una niña se tratase -Nejire... hemos tenido esta charla muchas veces, sabes que como héroes no tenemos días de descanso...-

Volver a enamorarte - Izuku x NejireDonde viven las historias. Descúbrelo ahora