Te odio Miya Atsumu (Miya Atsumu x Lectora)

Tenemos que hablar

Narra ___

Me despedí de Osamu y entré a mi casa, saludé a mi familia y me fui a mi habitación. Me cambié de ropa a una más cómoda, cogí mi móvil y me tiré en la cama. Acto seguido le mandé un mensaje a Amaya diciendo que ya se había terminado la cita. Segundos más tarde recibí una llamada de ella.

~Amaya~

Cuéntamelo todo, absolutamente todo.

Jaja, hola a tí también.

Hola, ahora cuenta.

Eres muy tímida con la gente, pero conmigo vas al grano.

¡Claro! Se trata de una historia sobre un trío amoroso entre mi mejor amiga y dos gemelos. ¿Tú que crees? Esto debería ser una telenovela.

Amaya, a veces me das miedo.

Que sí, que vale, pero cuéntame.

Vale. Pues mira, primero llegó Osamu a recogerme a mi casa, muy bien vestido por cierto.

Uyss.

Luego pues me cogió de la mano y me llevó al cine.

¡Madre mía! Y yo que pensaba que el atrevido era Atsumu.

Bueno sigo, pues total que entramos a la sala de cine a ver una película de terror.

Solo a tí se te ocurre ver una peli de miedo con un chico.

Durante la película hubieron varios sustos, pero uno me pilló desprevenida y me lancé a sus brazos.

¿Pero a tí no te gustaba su hermano?

Todavía no sé si me gusta. Bueno, continuo, nos quedamos mirándonos fijamente y él cada vez se acercaba más.

¡¿No me digas que se besaron?!

No, no, tranquila, me giré segundos antes y volví a ver la película, aunque la verdad me quedé con la duda de si me iba a besar.

___ cariño, es obvio que te quería besar.

Ah, en fin, que salimos del cine aún tomados de la mano y me llevó a un parque cercano.

La verdad no sabría decirte con cuál hermano te debes quedar.

Osamu me cae muy bien, pero es casi como un hermano para mí, en cambio con Atsumu es como una amor-odio o un ami-enemigo, ¿me entiendes?

Si, no tienes claro que son. ¿Qué pasó después?

Bueno, pues llegamos al parque y nos pusimos a pasear cerca de dónde hay niños pequeños, entonces le dije que si no le parecían lindos y en esa conversación me dijo que sería una gran madre y esposa.

Chica, que buen chico pescaste.

Pero no me gusta.

Si, pobre.

Luego nos sentamos en un Banco a seguir hablando, y de la nada empezó a ponerse nervioso. Entonces cuando estaba apunto de decirme algo apareció Atsumu.