Cap. 10 -. Tengo que alejarme

130 15 3
                                    

¿Nunca han tenido la sensación de estar en una pesadilla aún estando despiertos? Esa sensación de vacío e incertidumbre que se mezclan a la par haciendo que tú corazón se sobresalté y tu estómago de pronto quiera volver todo lo que comiste, bueno... Así es como me sentía en ese momento en el que el posible amor de mi vida me confesaba que tenía una PROMETIDA!!.

Mis ojos no se apartaron de su rostro literalmente buscando una señal de que aquello que me estaba confesando fuera una especie de broma o mal chiste, pero no fue así, su mirada llena de vergüenza evitaba la mía llena de decepción, aún escuchándolo salir de sus labios yo no podía dar crédito a lo que Daríen me decía y me preguntaba una y otra vez en mi mente ¿Porque me confesaba eso ahora? ¿Esto es una especie de prueba? ¿Acaso es así como pretende desasherse de mi?, Era mucho más fácil decirme que no quería que estuviera más cerca de él, pero no... Al pasar de un rato me di cuenta de que me decía la absoluta verdad, una verdad que lo incomodaba eso era notable, pero que quería sacarse del pecho.

No supe cómo actuar en ese momento y para ser sincera no quería solo irme sin escuchar una explicación, mi orgullo me lo exigía y también mi corazón que se estaba quebrando con cada minuto de silencio que pasaba, así que me puse de pie y mientras mis manos sacudían la arena de mi ropa mis labios temblaban ante la pregunta que haría pues no estaba segura de querer escuchar la respuesta.

—. ¿Estás comprometido? ¿Es una especie de broma? —pregunte con toda la seriedad que me fue posible.

—. Daríen me miró y soltó un suspiro largo como resignando a perderme. —Si... Lo estoy, esa chica en el cine es mi prometida desde hace cinco años. Perdóname por no decírtelo ese día.

Sentí como los pedazos de mi corazón caían dentro de mi pecho, para ser honesta aún guardaba la esperanza de que aquello fuera un mal chiste, pero no fue así...

—. Sentía arder mis ojos —y ¿Cuando pensabas decirme esto con exactitud? ¿Solo soy un chiste para ti? —pregunte abatida.

Daríen quiso acercarse pero lo evite dando un par de pasos hacia atrás, tan solo su cercanía me provocaba la más dura tristeza, la mayor decepción y no podía darme el lujo de sucumbir ante sus brazos si seguía acercándose a mi.

—. Déjame explicarte por favor... Esto pasó hace mucho y hasta ahora nunca siquiera hemos puesto fecha o hablado del asunto...

—. Solté una carcajada llena de sarcasmo. —¡oh por Dios que alivio! —dije tocando mi pecho a modo de burla. —no has puesto fecha que bueno, ya... Estoy más aliviada.

—. Serena por favor, yo no sé qué me está pasando, antes de conocerte realmente estaba seguro de que me casaría con ella pero ahora no lo sé, tú me has hecho sentir cosas que jamás nadie había podido, cuando estoy contigo me siento diferente, no sé cómo explicarlo... Me siento yo mismo, no quiero lastimarte pero tampoco quiero lastimarla a ella, siempre ah sido mi amiga y no me puedo permitir dañarla.

—. Cada palabra suya hacia añicos aún más mi corazón, era como si con cada palabra pisoteara mi orgullo. —¿sabes que?, No te preocupes, no tienes que elegir, de todas maneras tu y yo no teníamos nada, solo... Fue un momento y ya, no tienes que dañarla, no tienes que sentirte culpable tampoco y no te preocupes por mi, estaré bien, pero lo que si tienes que hacer es alejarte de mi camino, no quiero volver a verte en mi vida y tampoco quiero que me vuelvas a confundir, creí que tú eras diferente pero eres como todos los demás... Solo querías jugar conmigo como otros lo han hecho.

—. No, no Serena, no quería eso, por eso te estoy confesando todo, porque no quería lastimarte, no puedo alejarme de ti, es... Es como si tuvieras un imán que automáticamente me atrae hacia ti... —Daríen se acerco y tomo mi rostro con sus manos se acercó peligrosamente y yo sentía que me iba a desmayar.

¿Me amas?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora